El examen de septiembre
La Supercopa pone en juego el primer título de la temporada y mide la confección de las plantillas.- Barcelona- Real Madrid (21.30) y Caja Laboral-Bizkaia Bilbao (19.00) se miden en semifinales.- Mañana, la final (18.00)
Meses de cálculos, planificaciones y apreturas económicas; horas de cintas de vídeo, de conversaciones con representantes y de lectura de informes. Todo para configurar un equipo compensando, que no se pase del presupuesto y con la ineludible aspiración de mejorar los resultados del año anterior. Como examen a la labor veraniega de presidentes, directores deportivos y entrenadores llega la Supercopa, la primera oportunidad para enjuiciar a las nuevas caras en el primer escenario oficial. Así se han reforzado los cuatro equipos que se jugarán el primer título de la temporada.
Regal Barcelona
Marcelinho Huertas: El sustituto de Ricky Rubio tras su marcha a la NBA. El base brasileño será el encargado de suplir la creatividad del nuevo director de juego de los Timberwolves de Minesotta. Eléctrico en la penetración y dotado para el pase, el designado como mejor base de la ACB el curso pasado añade una mayor capacidad en el lanzamiento exterior que la que tenía su predecesor en el puesto.
Chuck Eidson: El otro fichaje de relumbrón del verano azulgrana. El ex jugador del Maccabi de Tel Aviv llega con el aval de su gran Final Four el año pasado. Su principal virtud es la versatilidad. Ya ha jugado como base, escolta y alero durante la pretemporada, y posee capacidad tanto para anotar como para repartir juego.
Xabier Rabaseda: Regresa a casa tras un buen año en el Fuenlabrada, el canterano azulgrana ocupará uno de los cupos nacionales, que no le sobran al equipo de Xavi Pascual. En sus 33 partidos del año pasado promedió 8,6 puntos y 2,4 rebotes en 22 minutos. Este año aportará minutos de refresco a los exteriores de renombre (Navarro, Eidson, Mickeal) como escolta o alero, mientras completa su progresión.
CJ Wallace: Tras la salida de Terence Morris, el ala-pívot del Gran Canaria será el cuatro abierto de Xavi Pascual. Pese a que como su compatriota norteamericano suele lanzar de tres, carece de la explosividad física y del caché que tenía Morris. El curso pasado promedió 10,5 puntos y 6,2 rebotes en 34 partidos.
Real Madrid
Rudy Fernández: Florentino Pérez acudió a su presentación acreditando su condición de fichaje estrella del equipo y de la competición. Además de su potencial ofensivo, llegado el caso es capaz de ser un valor defensivo, como demostró este verano en Lituania donde se proclamó campeón de Europa. Complementa su talento con un físico privilegiado que aprovecha en ambos lados de la pista. Llega con la certeza de tener que regresar a la NBA cuando se resuelva el cierre patronal, pero se perderá el primer torneo oficial, ya que no estará en la Supercopa por problemas físicos.
Jaycee Carroll: Una ametralladora con la precisión de un francotirador. De hecho, ha sido el máximo realizador durante las dos últimas ligas regulares de la ACB. Excelente triplista, en un día inspirado puede torturar a cualquiera. Escudero de Rudy mientras coincidan, será el referente anotador del equipo por fuera de la línea de tres si este regresa a la NBA. Su llegada debe suponer un salto de calidad respecto a Clay Tucker, el designado como anotador exterior del equipo el año pasado.
Martynas Pocius: El alero lituano, tras dos buenas temporadas en el Zalgiris Kaunas, llega al conjunto blanco tras la decepción que se llevó en el Eurobasket. Pocius pone el equilibrio en defensa y en ataque, un buen físico y capacidad para fabricarse sus propias penetraciones, además de la genética lituana para que no se le pueda despreciar como amenaza desde la larga distancia.
Bizkaia Bilbao Basket
Roger Grimau: En su búsqueda por consolidar la gran temporada pasada el BBB ha recurrido a sin reparos a hombres veteranos . Estrategia que le ha funcionado bien con hombres como Mumbrú o Hervelle. Entre ellos estará, desde ahora, el ex capitán del Regal Barcelona, acostumbrado a levantar trofeos en los últimos años. Grimau, a sus 33 años, añadirá, a la vez, revoluciones y experiencia. Muy capaz de penetrar y menos de lanzar, seguirá siendo un valor seguro a la hora de secar rivales.
Raúl López: El base inicia su tercera etapa ACB tras sus pasos por la NBA y el baloncesto ruso. A sus 31 años y con las rodillas castigadas por varias lesiones a lo largo de su dilatada carrera, López aportará solidez y templanza -además de un buen tiro exterior-, algo lejos ya de la improvisación que desplegó en sus inicios. Aunque el BBB le ha incluido en la lista del torneo, está de baja por lesión.
D'or Fischer: Otro jugador con pasado blanco. Fischer, un especialista en los tapones -nadie colocó más que él en la Euroliga hace dos años- y la intimidación, añadirá músculo y potencia al juego interior vasco, además de experiencia en equipos importantes. Pese a que destaca por su defensa, en ataque también es un jugador solvente, como demostró en los cuartos de final de la pasada Euroliga ante el Valencia.
Caja Laboral
Reggie Williams: El jugador de los Warriors de Golden State es una de las llegadas favorecidas por el cierre patronal de la NBA. Desde el puesto de escolta, Williams es un anotador nato -dos veces máximo realizador de la NCAA- y elegante, capacitado para el tiro de tres, como demuestran sus respetables 9,2 puntos (42,3% de acierto en triples) en 20,3 minutos el año pasado en la NBA. Sin embargo, acaba de salir de una lesión y está en duda su participación en la Supercopa.
Kevin Sheraphin: Otro jugador de la NBA reclutado por los de Dusko Ivanovic. El jugador francés, número 17 del draft de 2010 de la NBA, llega al Caja Laboral con el bronce del europeo colgado del cuello. Sobre el parqué destaca en defensa, gracias a su físico. De momento, le cuesta algo más encarar el aro, aunque su juventud -21 años- le da margen de mejora e incluso le ha dado en la pretemporada a irse a más de 20 puntos en algún partido.
Pablo Prigioni: Uno de los jugadores más representativos de la ACB vuelve al equipo en el que logró sus mayores éxitos. El inteligente base argentino bajará un punto las revoluciones del equipo en comparación con el escurridizo Huertas. Tras haber peleado en mil batallas, volverá a ser un referente en los momentos decisivos de los partidos. Aunque sus piernas no sean las de antes, seguirá siendo el cerebro sobre la pista.
Joey Dorsey: El Caja Laboral no se ha cortado a la hora de contratar peso en la pintura. El pívot, procedente de los Raptors de Toronto, no destaca por su altura -203 centímetros- pero sí por su capacidad de intimidación y su actividad defensiva cerca del aro. Prueba de ello es que en los 61 partidos que acumula en la NBA promedia más rebotes (3,8) que puntos (2,6).
Milko Bjelica: Entre los hombres interiores que se han sumado este verano al Caja Laboral, el serbio es con diferencia el que tiene mayor vocación ofensiva. El año pasado, con el Lietuvos Rytas, promedió 12,3 puntos en la Euroliga. Para hacer daño en ataque no descarta alejarse del aro, bien sea para penetrar desde lejos o para lanzar de tres, pese a que sus resultados desde el perímetro no sean especialmente buenos. Como contrapunto a las posibilidades que ofrece con balón, sufre cuando le toca defender.
Thomas Heurtel : El fichaje más a largo plazo que ha hecho el equipo -cuatro temporadas- es el del joven base (22 años) del Meridiano Alicante. Por su estilo vivaz -a veces en exceso- , está más cerca de Huertas que de Prigioni, con quien formará dupla de bases. Tras formarse en el baloncesto francés, apenas un año en la ACB -2.4 asistencias y 9.5 puntos de promedio- le ha valido para ser una de las apuestas de futuro de uno de los equipos punteros de la competición.
Maciej Lampe: El espigado polaco -2,11 metros- es un trotamundos del baloncesto que ya ha sellado su pasaporte en el Real Madrid, tres equipos de la NBA, Khimki, Maccabi y, en penúltimo lugar, Unics Kazan. Con buena muñeca incluso para lanzar de tres y con un variado surtido ofensivo también suma intimidación gracias a su envergadura, pese a no ser especialmente móvil. Se perderá la Supercopa, ya que está lesionado para varios meses.
Unai Calbarro: el último en llegar. Procedente del Santurtzi, con el que disputó el año pasado la LEB Plata (4,2 puntos y 3,6 rebotes), el pívot de 25 años ha convencido a Dusko Ivanovic durante los entrenamientos veraniegos con el equipo. Sin embargo, su papel como jugador número 12 de la plantilla parece que será reducido.
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