De Ibrahimovic a Catar

Asegurada la salud deportiva, la directiva del Barcelona, presidida por Sandro Rosell, ha convertido la cuestión financiera en la bandera de su mandato. Las cuentas de la entidad mejoran por la austeridad impuesta desde el consejo. El ejercicio de la temporada pasada se cerrará con unas pérdidas de 9,3 millones de euros, cuando se habían previsto 21, y el presupuesto del próximo curso (461,1 millones frente a los 473,4 del pasado) incluye un beneficio de 21,1 millones. Las pérdidas se han reducido (3%) y los ingresos han aumentado (14%). Y la marca Barça está tan consolidada que ahora mismo funciona mejor a efectos de explotación que la de cualquier entidad deportiva norteamericana.

Así de explícito fue ayer Xavier Faus, vicepresidente económico del Barça, en la exposición de los números del club. Hay, sin embargo, una rémora que impide inversiones superiores a los 100 millones: la deuda neta, rebajada de 430 a 364 millones, cuando la aspiración del consejo es reducirla a 250. La administración de la entidad, en cualquier caso, estaría, de momento, condicionada por dos factores: la operación Ibrahimovic, que a efectos contables ha costado unos 70 millones anuales -la masa salarial deportiva del Barça es seguramente la más alta de los clubes europeos- y el acuerdo de patrocinio con Qatar Foundation.

La ratificación del contrato con Catar, que supone unos 30 millones de euros por temporada hasta 2016, se considera vital para la buena marcha del club, "porque en caso contrario entraríamos en pérdidas", concluyó Faus, después de confirmar que cada directivo depositará en la Liga de Fútbol Profesional un aval de 3,7 millones.

Aunque el presidente y los directivos repiten que no quieren influir en la decisión del socio, todos coinciden en advertir del riesgo que supondría que la asamblea del próximo día 24 votara en contra del compromiso adquirido con Catar. Los socioserán consultados a tal efecto y su decisión será vinculante. Faus ya ha advertido, en cualquier caso, que no "existe un plan alternativo a Qatar Fundación" y que la publicidad se mantendría en cualquier caso hasta final de temporada, porque "Nike ya ha puesto en el mercado dos millones de camisetas con la inscripción".

"El Barcelona continuará siendo el Barcelona sin o con Qatar, sin o con publicidad, sin o con Guardiola, sin o con esta junta, pero será diferente", precisó Faus. "No perdemos dinero, pero la situación es delicada".

La directiva presentará, por otra parte, tres propuestas a la comisión de reforma de los estatutos: poner un tope de endeudamiento del club, impedir que se cierren los ejercicios con pérdidas y crear una reserva patrimonial. "El próximo salto cualitativo debe ser el patrimonial", concluyó Faus, ante la necesidad de reformar el Palau y el Camp Nou y habilitar el Espai Barça.