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La incógnita Geijo

El Granada no desvela el estado de su máximo artillero, que se acaba de recuperar de una operación de clavícula y que revolucionó el partido de ida contra el Elche

Un balón estrellado en el palo y un penalti provocado, que a la postre no tuvo premio. A Geijo (Ginebra, Suiza; 1982) le bastaron 24 minutos en la ida de la final del playoff contra el Elche para demostrar que es el ariete más peligroso del Granada. En la jugada de la pena máxima, sin embargo, Geijo se levantó y se echó la mano al hombro derecho con cara de dolor. Desde el banquillo, conscientes del remate del delantero, de su importancia como punto y final del juego colectivo, se miraron entre sí con cara de preocupación; Geijo fue operado de la clavícula en mayo y no estaba en plenas condiciones. Ahora Fabri, el entrenador del Granada, ha dado órdenes de que no salga información sobre el estado del delantero. No quiere dar pistas al Elche para el partido de vuelta (20.45; C+ Liga/GolT). Lo único que se filtra desde el club andaluz es que el delantero tiene molestias, que no está para jugar más de 25 minutos, que realiza sesiones de fisioterapia y que, si salta al césped, lo hará como en el primer partido, infiltrado.

Para Alex Geijo los problemas empezaron el pasado 12 de mayo, cuando chocó con el portero del Huesca, Cabrero, al filo del descanso de la 38ª jornada. El delantero, máximo artillero de su equipo (24 goles, cuarto en la lucha por el pichichi), intentó continuar pero no pudo seguir. Se pensó que era una luxación, pero una exploración más profunda confirmó los peores temores: el hispano-suizo se había roto la clavícula. Geijo tuvo que pasar por el quirófano y el periodo de recuperación estimado para este tipo de intervención es de 10 semanas. El ariete reapareció, sin embargo, en cuatro y media, justo para el partido frente al Elche. Quiere poner el broche a su mejor temporada; ha afinado como nunca su puntería en los 34 encuentros que ha jugado, cantidad que solo superó en la temporada 2005-06 (39 con el Xerez y 13 goles).

Cedido en el Granada por el Udinese -como tantos otros del equipo porque su máximo accionista, Gino Pozzo, también lo es del equipo andaluz-, Geijo solo estuvo seis meses en Italia. Le condicionaron, precisamente, múltiples lesiones. "Tuvo muchos problemas físicos que le impidieron triunfar en Udine", revela Sergio Gasparini, entonces director deportivo del club italiano; "pero Pozzo se dio cuenta del óptimo fichaje que era, y no quiso venderlo. Además, bajo el punto de vista humano es un chico extraordinario". Su rendimiento es tal en el Granada, que desde el estadio Friuli ya se sisea acerca de su posible regreso.

A dos días de empezar la primera eliminatoria del playoff contra el Celta, desde el Granada aseguraban que Geijo había terminado la temporada, que no se recuperaría ni para una hipotética final. Pero no fue así. Por lo visto en Los Cármenes el miércoles pasado, 25 minutos de Geijo son muchos minutos.

Geijo, delantero del Granada, celebra un gol de esta temporada
Geijo, delantero del Granada, celebra un gol de esta temporadaPACO AYALA

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