LeBron James toma Chicago

LaBron James se alzó sobre la temible defensa de los Bulls y empató a uno la final de la Conferencia Este (75-85). Miami respondió a los Bulls con su misma moneda, una defensa cerradísima con la que congeló por completó el marcador. Si los Bulls habían permitido una sola canasta de los Heat en los siete primeros minutos del último cuarto (del 65-71 al empate a 73), el equipo de Florida cerró su canasta en los últimos siete minutos del partido y de la igualdad a 73 se pasó al 75-85.

Y en esos momentos cruciales, un jugador por encima del resto, LeBron James, que, con nueve puntos casi consecutivos, fue el único capaz de descorchar las asfixiantes defensas a las que se remitieron ambas escuadras. The King acabó con 29 puntos, 10 rebotes y 5 asistencias, a pesar de que no estuvo fino desde la línea de tiros libres desde la que falló en cuatro ocasiones.

Si en el primer partido los Bulls y en especial la pegajosa defensa de Luol Deng le dejaron en 15 puntos, esta vez LeBron emergió en los momentos cruciales, mientras que a Deng, que anotó 11 puntos en el primer cuarto con un triple sobre la bocina desde media pista, le sucedió todo lo contrario y acabó con 13 puntos.

Wade y Haslem, destacados

Wade también cuajó un buen partido con 24 puntos y 9 rebotes y la flojísima aportación de los jugadores de banquillo de los Heat la salvó Udonis Haslem, con 13 puntos. Bosh, que anotó 30 puntos en el primer partido, se quedó en 10 puntos y 8 rebotes en el segundo.

Derrick Rose logró 21 puntos, 6 rebotes y 8 asistencias pero solo aportó dos de esos puntos en el último cuarto. Tampoco los jugadores interiores, Boozer y Noah, consiguieron sumar gran cosa: 16 puntos y 16 rebotes entre ambos. Los Bulls que empezaron dominando en el rebote, sobre todo en el ofensivo, con ocho capturas en los cinco primeros minutos, vieron como a medida que avanzaba el partido, los Heat les igualaban en ese aspecto. Ahora, la final se traslada a Miami, donde se disputarán los dos próximos partidos.