La hormiga mata al elefante
Di Martino, que no llega al 1,70m, se impone en el salto de altura
La imagen de una saltadora de altura es la de una mujer que roza los dos metros de altura, de piernas largas y muy estilizadas, y con la coordinación precisa para arquear con gracia el cuerpo por encima del listón. La de la nueva campeona de Europa, la italiana Antonetta Di Martino, no tiene nada que ver con ella. Es una mujer que no llega a 1,70m de altura y son sus piernas prodigiosas las que le impulsan por encima de los dos metros.
Hoy Di Martino se ha proclamado campeona de Europa bajo techo tras superar el listón a 2,01m de altura. Incluso lo ha intentado dos centímetros más arriba, aunque ha fallado. Pero no es un imposible para ella. Su mejor marca en pista cubierta, lograda en febrero, es 2,04m y es capaz de saltar 2,03m al aire libre, donde el viento sopla y la luz puede distraer a las saltadoras. Es decir que Di Martino, que tiene 32 años y una larga carrera internacional, es capaz de saltar más de 30cm sobre su altura.
Sus rivales, las mejores saltadoras del mundo, no necesitan tanto. La croata Vlasic, la reina de la disciplina, mide 1, 93m, la española Ruth Beitia, plata, 1,92m, e incluso la alemana Ariane Friedrich, le saca 10 cm. Solo la estadounidense Chaunté Howard-Lowe, la saltadora más explosiva del circuito, se le asemeja: mide 1,75m y vuela hasta 2,05cm.
El secreto de la italiana, que nació en un pueblecito cerca de Nápoles y fue subcampeona mundial al aire libre en 2007, son sus piernas, como muelles, y que es capaz de arquear mucho más la espalda que sus competidoras, que a su lado parecen rígidas tablas.
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