El próximo será Deulofeu

A Martín Montoya le llaman Monty. Tiene 19 años -cumple 20, el 14 de abril- y juega en el filial del Barcelona, a las órdenes de Luis Enrique, que está encantado con el rendimiento que le da un tipo al que no le molesta deslomarse por el bien del equipo. Por eso, Montoya juega mucho, como nadie. Juega tanto que en todo el año solo se ha perdido dos partidos: uno por acumulación de tarjetas y el otro, el del sábado pasado, porque Guardiola se lo llevó a Mallorca con el primer equipo.

No se lo esperaba, pero Montoya debutó en Primera, en el minuto 85, sustituyendo a Adriano: lateral por lateral. Así de fácil, así de naturales son las cosas en el Barcelona. Hay dudas sobre si a Montoya le alcanzará el talento para afianzarse en el primer equipo. "Le cuesta atacar largo", explican los técnicos de las divisiones inferiores, los mismos que dan por hecho que se ganará la vida como futbolista en cualquier equipo de Primera División. A Luis Enrique le encanta el futbolista de Viladecans, dicen que le recuerda a Chapi Ferrer, que fuera su compañero en el Barcelona y que entrena al Vittese holandés. "Digamos que llega al escalón de Navarro", asegura un técnico que conoce a Montoya desde que fichó por el Barça siendo benjamín.

Sergio Busquets fue el primer futbolista de la cantera al que hizo debutar Guardiola en el primer equipo. Fue contra el Racing, en su segundo partido en Primera. Montoya, ha sido el último. Con él, lleva el técnico de Santpedor 16 jugadores a los que ha dado la alternativa.

Para sustituir a Montoya, Luis Enrique echó mano de Albert Dalmau, lateral del juvenil A. En el mismo partido, contra el Numancia, debutó Espinosa. Los dos son de la quinta del 92. Le comparan con Iniesta, porque es muy blanco de piel, nació en La Mancha y juega de volante. Le sobra desparpajo. En Soria, en su primera partido en Segunda A, marcó un golazo. "Es lo mismo que jugar en el juvenil; solo se trata de ser uno mismo", confesó al micrófono de Jordi Borda, enviado especial de Catalunya Ràdio a Los Pajaritos, donde el equipo de Luis Enrique goleó al Numancia (4-6).

"A su edad, Iniesta ya era titular en el B", avisan en el fútbol base, donde tienen claro que Espinosa, al igual que Montoya, también se ganará la vida con esto. "No todos, pero van a llegar muchos". Y aunque alguien anunció que el próximo crack de la cantera sería africano, no parece que vayan por ahí los tiros: "Cuando el físico se iguala, el talento manda", asegura un técnico de la cantera azulgrana. "El bueno es Sergio Roberto" señalan muchos. Es otro volante, debería jugar en el juvenil A, pero lidera el equipo de Luis Enrique, junto a Bartra, Fontàs, Thiago Alcantara y su hermano Rafa, que ya se ha saltado una categoría.

Rafa, Rafinha, el hijo menor de Mazinho, empezó a las órdenes de Óscar Garcia Junyent, que al frente del juvenil A no ha perdido un partido en lo que va de curso, -lleva 19 victorias en 24 jornadas y siete empates- y ha marcado 75 goles por los 17 que ha encajado. "Los chavales, que son muy buenos", se limita a decir el entrenador, que tiene prohibido hablar con los medios. "El bueno es él, esa generación no es la mejor que sube"·, advierten en el club barcelonista. La mejor, aseguran, es el grupo que ahora milita en el Cadete A, es decir, los chicos del 94: Sámper, Grimaldo, Sandro, Godwill y por encima de todos, Deulofeu, un delantero enorme. Solo tiene un problema: "Sabe que es muy bueno", coinciden sus entrenadores. El martes, Deolofeu subirá otro peldaño en su carrera futbolística: Luis Enrique cuenta con él para el partido que el filial jugará contra el Córdoba.