El Valencia ya no se asusta

En ocasiones anteriores, la llegada del Manchester United a Mestalla causaba un respeto reverencial. En las dos últimas, el Valencia logró sendos empates que sonaron a grandes victorias, tal era la magnitud del equipo que dirige desde hace 24 años Alex Ferguson. Ahora ya no. El Valencia aprovecha su fulgurante e inesperado arranque para medirse hoy al Manchester de igual a igual. Favorecido por las relevantes bajas por lesión de Rooney, Giggs, Scholes y Valencia, pero también por su titubeante comienzo en la Premier, en la que es segundo, a tres puntos del Chelsea, dando muestras de vulnerabilidad.

Desde que se marchó Cristiano Ronaldo, en 2009, el Manchester ya no es el que era: la pasada temporada acabó en blanco tanto en la Liga como en la Champions. La marcha del as portugués aceleró el despegue de Rooney, pero el ariete inglés cayó en una depresión en el Mundial de Sudáfrica, agudizada al volver a casa por sus problemas matrimoniales. De modo que Berbatov, el búlgaro entristecido, ha tenido que dar un paso al frente y alegrar la vida de los hinchas del United con los tres goles que marcó al Liverpool.

Tampoco en la Champions el estreno ha sido el esperado. Un empate sin goles frente al Rangers en Old Trafford certifica la inestabilidad del momento. Todo lo contrario que en el Valencia, eufórico después de sumar cuatro victorias y un empate en la Liga, además de haber vapuleado entre medias al Bursaspor en Turquía (0-4) en su regreso a la Champions dos campañas después. "No tenemos miedo al Manchester", proclamó ayer el entrenador valencianista, Unai Emery, de 38 años, que rindió tributo a su veterano colega, de 68, al referirse a él como "un espejo en el que mirarse". Reflexionando sobre el oficio de técnico, Emery declaró: "Cuando era futbolista, pensaba como entrenador. Ahora que soy entrenador, muchas veces pienso como jugador".

El Valencia presenta media docena de debutantes en el torneo, de ahí la ilusión de muchos de ellos a la hora de enfrentarse al United. "Cuando eres pequeño, siempre sueñas con jugar contra el Manchester", dijo Pablo Hernández, uno de los que se estrenan junto a Soldado, Aduriz, Tino Costa o Mata. Todos, en óptimo estado de forma.

El centro del campo valencianista funciona y la mejor prueba está en el medio de creación, un puesto maldito en los últimos años a la sombra de la decadencia de Baraja. Hasta este verano. Comenzó de titular Ever Banega, muy poderoso en la dirección, hasta que se lesionó frente al Racing; el testigo lo tomó Tino Costa, con una actuación estelar en Bursa, y le relevó Manuel Fernandes en un partido muy convincente frente al Sporting en Gijón. A eso se añade la magnífica impresión causada por el turco Topal, el mediocentro de contención fichado para dar descanso a Albelda. La eterna pareja, Albelda-Baraja, parece, por fin, tener sucesores.

Hasta ahora, el Valencia ha rendido mejor fuera que en Mestalla. De sus seis partidos, los dos de casa, ante el Racing y el Atlético, han sido los más incómodos para el cuadro de Emery. Su principal duda hoy es si mantiene a dos delanteros (Aduriz y Soldado), como en Gijón, o prefiere volver a apostar por un mediapunta y un solo ariete, como en citas anteriores. Aduriz y Soldado están encantados de jugar juntos, pero eso supondría que saliera del once uno de los tres volantes: Joaquín, Pablo o Mata.