El Mallorca se olvida de defender
Los de Manzano dominan, pero Riki decide para el Depor
No cabe más que aplaudir al Mallorca . Inició el campeonato envuelto en tinieblas institucionales y lo acaba en disposición de ser cuarto y jugar la eliminatoria previa de la Liga de Campeones. Lo hubiera tenido en la mano de superar ayer al Depor, pero penó por su falta de puntería.
Cuando se vieron al final de la primera vuelta, Mallorca y Deportivo se jugaron en Son Moix la cuarta plaza, ayer sólo los primeros seguían ahí. Hay disculpas y atenuantes para explicar el bajóndeportivista, pero la gente no tiene piedad. Ayer los aficionados más jóvenes, los que más empujan cuando otros callan o reprochan, se ausentaron en el inicio del partidoy dejaron una pancarta sobre la grada vacía: "Vuestra segunda vuelta merece esto", decía. Los jugadores la vieron nada más salir al campo y dio la impresión de que les tocó el orgullo.
DEPORTIVO 1 - MALLORCA 0
Deportivo: Aranzubía; Manuel Pablo, Rochela, Lopo, Raúl (Filipe, m. 65); Juca, Sergio, Juan Rodríguez; Valerón (Iván Pérez, m. 84); Adrián y Riki (Mista, m. 78). No utilizados: Manu, Laure, Colotto y David Añón.
Mallorca: Aouate; Mattioni (Varela, m. 71), Iván Ramis, Rubén, Ayoze; Julio Álvarez (Keita, m. 82), Martí, Mario Suárez, Castro; Aduriz y Webó (Victor Casadesús, m. 65). No utilizados: Lux, Josemi, Pezzolano y Bruno Chica.
Árbitro: Turienzo Álvarez (C. T. Castilla-León). Amonestó a Adrián por el Deportivo y a Aouate, Matteoni y Ayoze
Goles: 1-0. M. 68. Riki.
Incidencias: Riazor. Unos 9.000 espectadores.
El Mallorca, que esperaba un rival relajado, pareció perplejo ante el inesperado despliegue del Depor profundo y vertical, pero se activó con las noticias que le llegaron desde el Pizjuán. Marcó Messi en Sevilla y el Mallorca encontró la pelota y apareció el Chori Castro termómetro de un equipo entregado. Comenzó a padecer el Deportivo, que sobrevivió por la falta de acierto en la definición rival. Menos enviar la pelota entre los tres palos, todo lo hizo bien el Mallorca que además estaba empujado por dos mediocentros con recorrido e iba a rebufo del trabajo de Aduriz, un peleas no exento de clase.
Pero la ineficacia en el remate del combo que dirige Manzano dio vidilla al de Lotina. No había nada en juego para el Deportivo, pero cuando se llevan once jornadas sin catar el triunfo no hay jugador al que no le hierva la sangre. Por ejemplo a Riki, autor de los tres goles que había marcado su equipo en las ocho jornadas anteriores.
Por ahí, por el amor propio, empezó a encontrar problemas el Mallorca, que en cuanto se empezó a sentir apurado por el reloj comenzó a despistarse. Precipitado y arrebatado, pasó de controlar el juego a ir detrás del balón, vivió un mal rato el primer cuarto de hora tras el descanso cuando primero Riki y después Lopo pudieron marcar. Fue el preludio de un final vibrante en el que Luego, Riazor volvió a jalear las galopadas de Filipe, que inició la acción del gol del inevitable Riki y destapó al Mallorca, que se olvidó de defender. Ni así llegó al triunfo que le hubiera ayudado a rubricar una temporada excepcional.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.