Ferrero prolonga su estado de gracia

Juan Carlos Ferrero está recuperando viejas sensaciones. Después de varios años relegado a un segundo plano de la escena tenística, el valenciano se ha reencontrado con la victoria. En apenas dos semanas, Ferrero ha conquistado dos trofeos consecutivos: el de Costa de Sauipe, en Brasil, y el de Buenos Aires, en el que derrotó en la final a su compariota David Ferrer por 5-7, 6-4 y 6-3. "Ganar dos semanas seguidas es increíble, es una gran sensación", apunta el mosquito, que se convierte en el cuarto jugador español que conquista el trofeo bonaerense tras la victorias de Carlos Moyá (2003 y 2006) y Tommy Robredo (2009).

No fue sencillo el triunfo de Ferrero, ya que cayó en un primer set dominado por la intensidad de Ferrer. En la segunda manga, el de Onteniente se rehizo e imprimió más velocidad a su juego. Ambos mantuvieron sus servicios, pero con 5-4, Ferrero ofreció dos golpes paralelos y un drive abierto inalcanzables para Ferrer. Ya en el tercer set, el alicantino volvió a fallar varios golpes y sufrió un break con 5-3 que concedió el torneo a su rival, que buscó las líneas en todo momento.

"He estado trabajando muy duro y puedo ser más agresivo", afirma Ferrero, que también admite que su mejoría física le ha ayudado mentalmente. "Me siento muy fuerte y sé que tengo más recursos ahora cuando juego puntos importantes. He estado trabajando con un amigo la parte mental y todo está funcionando". Sobre el partido, manifestó que "fue muy complicado e intenso. Nos conocemos desde siempre y somos muy buenos amigos. Nos leemos nuestro juego muy bien y con él se sabe que llegará a pelotas a las que otro no lo haría".

Ferrer, por su parte, comentó que "cada vez que jugamos sabemos que será con mucho ritmo y que quien esté en mejor forma ganará. Fue muy intenso y ambos tuvimos nuestras oportunidades. En el tercer set, él fue mucho más agresivo y eso marcó la diferencia en los puntos importantes".