El Almería frena al Villarreal
En buena dinámica y feliz llegaba el Villarreal, en racha, para enfrentarse a un Almería nuevo con Lillo. Y se dejó sorprender, por un equipo ordenado con el equilibrio en el marcador y ambicioso con el resultado en contra. La ventaja adquirida por el conjunto amarillo por un certero remate de Nilmar al final del primer período quedó en nada por la torpeza de Marcano en mitad del segundo tiempo al cometer primero un ingenuo penalti y resultar expulsado después. Frenazo en seco para un equipo que comenzaba a gustar, convencer y ganar.
El frío ambiente no invitaba al espectáculo, que resultó más disputado que brillante. Hay que ser un apasionado y temerario aficionado al fútbol, para acercarse a El Madrigal un sábado a las diez de la noche y con el termómetro rayando los cero grados y una humedad que te cala el frío en los huesos. Bien atado en el centro del campo, no encontró los espacios el Villarreal. Le faltó la sutileza habitual. Anunciaba Lillo, el nuevo inquilino del banquillo del Almería, que iban a Vila-real a provocar situaciones, no a esperar acontecimientos. Y provocó histeria en el rival. Sin delanteros al uso, apretadas sus líneas, el conjunto andaluz desesperó al Villarreal, que no encontraba fisuras para echar mano al adversario.
VILLARREAL 1 - ALMERÍA 1
Villarreal: Diego López; Ángel, Godín, Marcano, Capdevila; Pirès (Cani, m. 68), Senna, Bruno, Cazorla (Fuster, m. 81); Rossi y Nilmar (Llorente, m. 68). No utilizados: Oliva; Eguren, Marcos Gullón, Ibagaza y Fuster.
Almería: Alves; Juanma Ortiz, Pellerano, Acasiete, Cisma; Bernadello, Mbami (Nieto, m. 65), Soriano; Corona, Piatti y Crusat (Goitom, 57). No utilizados: Esteban; Macedo, José Ortiz, Borzani y David Rodríguez.
Goles: 1-0. M. 39. Nilmar a centro de Cazorla. 1-1. M. 67. Corona de penalti.
Árbitro: González González. Amonestó a Mbami, Senna, Juanma Ortiz Fuster. Expulsó a Marcano (m. 83) por doble cartulina amarilla.
Unos 4.000 espectadores en El Madrigal.
Las pizarras, el tacticismo, anula la creación. El equilibrio se fragmenta cuando la imaginación florece. Dibujó Cazorla una finta e inventó un centro. Acudió al remate Nilmar y llegó el gol del Villarreal, el que abría el marcador y deshacía el complicado nudo del Almería. Tiempo y confianza necesita Nilmar para demostrar que tiene gol, que por algo es el segundo delantero de la selección canarinha, que no es poco. Tiempo ha necesitado también Valverde para sacar rédito de los infinitos recursos que posee. Siguió creyendo en sus posibilidades el Almería hasta lograr trabajado empate que frena en seco al Villarreal.
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