Gasol mantiene invictos a los Lakers

Si había alguna duda sobre que Los Angeles Lakers tenían un equipo completo tanto en el cuadro titular como en el banquillo se despejó cuando se enfrentaron a los Mavericks de Dallas y lograron remontar una desventaja de 12 puntos del primer cuarto para ganar por 99-106 y mantener el invicto. El guión se repitió una vez más a la perfección y también con los mismos protagonistas, el escolta estrella Kobe Bryant de líder, el ala-pívot español Pau Gasol de su lugarteniente, que esta vez anotó los puntos decisivos, y a un banquillo que les hizo el trabajo sucio en el tercer cuarto para acercarlos en el marcador y sentenciasen en el cuarto.

Bryant volvió a encabezar el ataque de los Lakers al conseguir 27 puntos, pero el jugador decisivo para los Lakers fue Gasol que aportó un doble-doble, con 22 tantos y 11 rebotes, y protagonizó la jugada de tres puntos cuando faltaban 23 segundos para el final del partido que iba a dar a su equipo la ventaja parcial de 102 a 97, decisiva. Gasol se elevó sobre el alero alemán Dirk Nowitzki anotó y, además, forzó una personal por lo que fue a la línea de tiros libres y acabó con las esperanzas de los Mavericks que habían vuelto a meterse en el partido con los triples del reserva Jerry Stackhouse.

La acción de Gasol, que jugó 36 minutos, para anotar 8 de 15 tiros de campo y 6 de 9 desde la línea de personal, dejó tocados a los Mavericks que intentaron el empate para forzar la prórroga pero sólo el base Jason Terry pudo anotar de nuevo canasta para el 99 a 102 antes que Derek Fisher, desaparecido todo el partido, anotase cuatro tiros libres de los seis puntos que aportó. El escolta reserva Trevor Ariza aportó 13 puntos, uno más que el alero reserva Lamar Odom, mientras que el pívot Andrew Bynum logró un doble-doble de 11 puntos con 10 rebotes para los Lakers que tienen marca perfecta de 6-0 por primera vez desde la temporada 2001-02, cuando lograron su último título de liga.

Por los Mavericks (2-5), Terry aportó 21 puntos, pero sólo cuatro en la segunda parte; lo mismo sucedió con Jason Kidd, que logró su primer triple-doble de la temporada y el número 101 como profesional con 16 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias, pero sin que fuese clave en la segunda parte. Nowitzki jugó una gran primera parte, pero se quedó con 14 puntos, sólo anotó dos en la segunda para fallar 12 de 17 tiros de campo, lo que confirmó que está en plena crisis de efectividad.

Los Lakers comenzaron dominando el partido y el marcador para mantenerse con la ventaja parcial de 8 a 10 cuando se habían jugado 3:54 del primer cuarto, pero la perdieron con un triple de Green con 7:56 por jugarse que puso arriba a los Mavericks (11-10), que llegaron luego a tener hasta 12 puntos de ventaja (35-23). El equipo angelino, con sólo Bryant y Gasol como efectivos en el ataque, no pudieron evitar que al descanso el mal menor fuese de seis puntos abajo en el marcador, 60-54, después de la gran primera parte que habían hecho los titulares de los Mavericks.

El ataque del equipo tejano había recuperado la mejor versión de Terry, quien con 17 puntos y cuatro recuperaciones de balón iba a ser la mayor pesadilla para los hombres de Phil Jackson. También iba a establecer la diferencia en el marcador del descanso la aportación completa de Kidd, que dominó por completo en el duelo con Fisher al conseguir 11 puntos, siete rebotes, seis asistencias y dos recuperaciones de balón. Pero si los hombres bajos de los Mavericks habían hecho su trabajo a la perfección, Nowitzki estuvo consistente en el ataque y también aportó 12 puntos, que junto a los siete del reserva Stackhouse iban a poder con los 14 y 13 tantos que lograron, respecivamente, Bryant y Gasol.

Los Mavericks tuvieron un comienzo arrollador en el tercer periodo con la figura del pívot Erick Dampier, que dominó el juego bajo los aros y también acertó en el ataque con ocho puntos y ocho rebotes, pero desaparecieron los titulares. Mientras que los Lakers se apoyaron en los reservas para conseguir 11 puntos por uno que lograron los de los Mavericks y la diferencia al concluir el tercer periodo era ya sólo de tres tantos (79-76), aunque la primera vez en la temporada que llegaron al cuarto periodo abajo en el marcador.

El capítulo siguiente fue un rebote ofensivo y mate espectacular del reserva, de origen dominicano, Trevor Ariza nada más comenzar el cuarto periodo para luego llegar la entrada en escena de Bryant, con su instinto asesino, reflejado en nueve puntos y la efectividad de Gasol como hombre de confianza que le acompaño al triunfo final. El gran triunfo para los Mavericks fue que al menos no perdieron por una diferencia de 22 puntos que es la media que hasta ahora habían tenido los Lakers en sus victorias.

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