'El Nido' baja el telón de los Juegos

Punto y seguido. Los Juegos Olímpicos de Pekín han terminado con la misma espectacularidad que el día 8 de agosto sorprendió al mundo entero con la inauguración y con la mente puesta ya en la próxima cita en Londres. China, un país de 1.300 millones de habitantes, por una vez ha dejado de mirarse a si misma y se ha globalizado. Y como recompensa, Pekín ha conseguido bajar registros de anteriores citas olímpicas con 43 récords mundiales, 132 récords olímpicos, 204 países participantes, 87 de ellos ganadores de medalla y más de 4.500 controles antidopaje.

El arranque de la gala, al igual que sucediera hace tres semanas, ha comenzado con una cuenta atrás, acompañada con el elemento clave de estos Juegos, el fuego, símbolo de la armonía china. Tras la demostración pirotécnica, todo el estadio se ha puesto en pie para escuchar el himno chino, a la vez que se izaba la bandera del país. A continuación, cientos de bailarines invadieron el suelo del estadio para golpear los tambores con ropas tradicionales chinas. Sonidos de tambores que se entrelazaban con la suave armonía de los cascabeles. Pero el futuro también ha hecho acto de presencia con hombres 'jumping' haciendo un guiño a países occidentales como Estados Unidos.

Sobre el terreno donde se han vivido momentos espectaculares y emocionantes, como los tres récords del mundo de Bolt, la superioridad de Bekele o la imbatibilidad de Isinbayeva, la segunda parte de la ceremonia ha comenzado con los auténticos protagonistas, con los deportistas que nos han emocionado con sus actuaciones y han centrado nuestra atención durante diecisiete días. En el centro del estadio y en círculo, los atletas que todavía se encuentran en la capital china han disfrutado de la fiesta y se ha respirado un ambiente más distendido que en la apertura.

Tras el paseo de los deportistas por el escenario, llegó la parte protocolaria de estos Juegos con discursos de las máximas autoridades. El primero en tomar la palabra ha sido el presidente del Comité de Organización de los Juegos de Pekín, Liu Qui, que ha mostrado su "gratitud al COI y a todos los amigos que han contribuido al éxito de estos Juegos Olímpicos. Estos últimos días hemos asistido a competiciones vibrantes, mostrando su perseverancia con gallardía y obteniendo nuevos récords mundiales. Enhorabuena a todos", ha sentenciado.

A continuación el presidente del Comité Olímpico Internacional, Jacques Rogge , ha tomado el testigo. "Queridos amigos chinos, esta noche llega el final de una temporada juntos. Gracias por todo. A lo largo de estos juegos, el mundo ha comprendido más a China y China ha conocido mejor al mundo. Nuevas estrellas han nacido, con alegrías y lágrimas, recordaremos por mucho tiempo esta cita olímpica, al igual que los Juegos Paraolímpicos que a continuación comienzan". Pero sin duda la frase más emotiva del presidente del COI ha llegado cuando ha confesado que "estos Juegos Olímpicos han sido realmente excepcionales".

Rogge, tambíen quiso acordarse de la deportividad vivida entre atletas de países en conflicto. "Agradecer el comportamiento de los deportistas que han sabido dejar a un lado los conflictos entre naciones y han convivido en paz y armonía este tiempo", ha subrayado. "Declaro los Juegos Olímpicos finalizados y hago un llamamiento a los jóvenes para la cita de 2012 en Londres", con esta frase ha concluido la intervención del presidente del COI, a la vez que se alzaba la bandera del máximo organismo deportivo y sonaba su himno de fondo.

Momentos después ha llegado el momento más importante para la capital británica. El alcalde de Pekín, Guo Jin long, ha cedido la bandera del los Juegos Olímpicos a su homólogo londinense, Boris Johnson, mientras que las banderas de los 204 países abandonaban el estadio olímpico. A partir de aquí, la ceremonia trasladó a los espectadores asistentes a Londres con el conocido autobús de dos pisos, vinculado a Londres, que acogerá los Juegos dentro de 1.432 días, o lo que es lo mismo, el 27 de junio de 2012. Una recreación de la próxima sede de los Juegos, con iconos representativos de la ciudad, como el Big Ben, el estadio de Wembley, Buckingham Palace o Wimbledon han sido unos de los lugares emblemáticos representados.

Beckham levanta 'El Nido'

Y la explosión de los aficionados ha llegado con la aparición del ídolo de masas británico y chino. El jugador de fútbol David Beckham que ha hecho el relevo de la antorcha olímpica, junto al guitarrista de la banda de rock Led Zeppelin, Jimmy Page. El 'siete' de Inglaterra ha chutado un balón, mientras 'El Nido' estallaba de júbilo. Pero la alegría se transformó rapidamente en tristeza porque llegaba el momento de apagar la llama olímpica que ha iluminado Pekín las últimas semanas. No sin antes extender el pergamino de la historia de estos Juegos Olímpicos, recordando día a día los mejores momentos, hazañas y disgustos vividos, hasta cubrir el perímetro del estadio y llegar a la antorcha, momento en el cual se ha apagado la llama olímpica.

Después ha llegado el turno de la 'Torre de los Recuerdos' de los Juegos con 396 actores que han realizado diferentes figuras, siempre con el color rojo de fondo. A una altura de 25 metros, los miembros de la actuación crearon el logotipo de los Juegos, así como una recreación de la antorcha olímpica, que ha finalizado con el levantamiento de unas cintas de luz, símbolo de la amistad. Y para poner el punto final a los recuerdos de la gala, no podía faltar la pólvora, que ha hecho de puente para comenzar la fiesta.

La canción más escuchada en los últimos días, I love Beijing, ha sido representada por músicos y bailarines chinos. Pero todavía faltaba la Llama del amor, representada por una soprano china y por el tenor español Plácido Domingo, que ha arrancado un gran aplauso de los 90.000 espectadores que se han dado cita en el Estadio Nacional de Pekín. Una última canción, junto a 75 acróbatas luminosos que han botado por el estadio, ha puesto el broche final a una gala emotiva y espectacular en luz y sonido.