Torres logra otro 'hat trick' y hace historia

El español Fernando Torres firmó un nuevo "hat trick", el segundo en la Liga inglesa, y gracias a sus tres goles, más otro de Steven Gerrard, el Liverpool goleó al West Ham (4-0) y se sitúa en el cuarto puesto, con los mismos puntos que el Everton (53), con el que lucha por una plaza en la próxima Liga de Campeones.

Torres, que ya anotó tres goles contra el Reading, en la Copa de la Liga, y otros tres ante el Middlesbrough, en la Premier, suma ya veintitrés tantos en el total de competiciones. El encuentro de Anfield, correspondiente a la 28a. jornada de la "Premier", se saldó sin sorpresas y con el triunfo de la escuadra anfitriona, que respira de nuevo en esta competición.

Los tres puntos conseguidos hoy gracias a Torres auparon a la formación que dirige Benítez al cuarto puesto de la clasificación, zona de "Champions", del que desbancaron además al Everton, con el que ahora igualan en 53 puntos. El plantel local contó con una abultada representación española, que corrió a cargo de su meta, Pepe Reina, Álvaro Arbeloa, Xabi Alonso y Fernando Torres, el "talismán", una vez más, del técnico madrileño.

El ex del Atlético de Madrid acertó por primera vez en la meta de Green en el minuto 7, tras rematar un centro del holandés Dirk Kuyt. Si la primera mitad fue toda una odisea para los "Hammers", el Liverpool no dio mucha tregua en el segundo acto, donde el West Ham apenas tuvo oportunidad de tocar la pelota. De nuevo Torres se convirtió en el mago del Liverpool, al que regaló otro gol, en el minuto 61; y para rematar su intervención de la jornada, fue este mismo jugador el que firmaba el tercero, que llegaba en el 80, a pase del noruego John Arne Riise.

La pesadilla del West Ham no concluyó ahí. El capitán del Liverpool, Steven Gerrard, se unió al festival de goles de su colega Torres y ayudado por otro español, Xabi Alonso, anotó el cuarto (83). En el último minuto, un potente disparo a meta de Luis Boa Morte amagó con quebrar la zaga del Liverpool, pero la pericia de Pepe Reina abortó el momento de su rival de Londres.