Los amigos de Zidane y de Ronaldo revolucionan Málaga
El francés revoluciona La Rosaleda, Ronaldo muestra su baja forma y Schumacher vuelve a deslumbrar sobre el césped
Poco juego aunque mucha voluntad, cachondeo y buen rollo. El quinto partido, patrocinado por el Ministerio de Fomento y Renfe, contra la pobreza que han disputado los amigos de Zidane contra los amigos de Ronaldo ha llenado el estadio andaluz de la Rosaleda esta tarde en Málaga. En el coliseo malagueño, estrellas en activo y jugadores que aunque ya no entrenen en ningún equipo, están en muy buena forma física. Es el caso de Zidane, que ha revolucionado a los cerca de 30.000 aficionados -decenas de niños han saltado al campo para hacerle fotos con el móvil poco antes de empezar la primera parte- y al que gran aparte del público quería fichar.
Enfrente, Ronaldo, con bastantes kilos de más, muy sonriente y con pelo a lo afro, ha jugado media hora justa. Treinta minutos en los que el brasileño ha demostrado su bajo estado de forma tras salir de su lesión de rodilla, pero también la capacidad para llenar de amigos un campo de fútbol con un objetivo: ayudar al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) que está recaudando fondos para varios proyectos de desarrollo en América Latina, Asia y África.
"Una persona de cada 100 vive por debajo del umbral de la pobreza", ha recordado la representante de PNUD, Cécile Moliner que ha recalcado que partidos como éste ayudan a cumplir con los 8 objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) para mejorar la calidad de vida de la mayoría de las personas. "En una manifestación del compromiso personal, de lo que se puede hacer para luchar contra la pobreza. Hay una movilización fantástica", ha añadido.
Con ese fin, Ronaldo y Zidane han vuelto a juntar a muchos futbolistas y estrellas de otros deportes como el golfista Sergio García o el ex piloto de fórmula uno, Michael Schumacher, que ha sido uno de los más aplaudidos. También se ha sumado a la fiesta la Ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, quien aunque ha confesado que no le gusta demasiado el fútbol y prefiere el baloncesto - se ha escapado al final de la primera parte- , ha querido recalcar "el buen ejemplo de los futbolistas que recaudan fondos para los países que más lo necesitan". Álvarez se ha contagiado del buen ambiente reinante y sonriendo ha señalado - sobre las obras del Ave- que aunque "todas las obras tienen sus problemas todas las aguas volverán a su cauce".
La ministra ha sido la encargada de hacer el saque de honor. Después ha comenzado el encuentro que ha terminado como ha empezado: con empate, (2-2) y con los niños saltando de nuevo al campo para abrazar a sus ídolos y pedirles la camiseta. Como Zidane no estaba, todos han ido corriendo a por Renato. Una fiesta que ha servido para comprobar que Zidane sigue revolucionando los campos y que Karembeu, Hristo Stoichkov o el italiano Pierluigi Collina, árbitro del partido por quinta vez consecutiva, no tienen ningún problema para sumarse a una buena causa.
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