España consigue una nueva victoria ante Alemania en la preparación para el Eurobasket 2007

España logró su vigésimo cuarto triunfo consecutivo al vencer a Alemania por 77-61, en un encuentro en el que tuvo que trabajar de principio y a fin y que se resolvió en el último cuarto gracias a la magia de Juan Carlos Navarro, que anotó tres triples consecutivos que acabaron por romper el choque.

Los hombres que dirige Pepu Hernández fueron de menos a más y al final la victoria se fraguó gracias a la pléyade de estrellas con las que cuenta entre la plantilla española. Cuando no es Reyes, es Pau Gasol, cuando no su hermano, o Navarro. Cuando más feo se ponía el encuentro para los locales, el escolta sacó la muñeca a pasear para hacer trizas el encuentro.

La duda de si jugaría o no Nowiztki se despejó en el calentamiento. Sólo había que ver las ganas que le ponía el alemán a cada acción para saber que saltaría a la cancha en el quinteto inicial de una Alemania que se sustenta en la veteranía de los Fermerling, Okulaja o Greene. Además, de ser el hombre referencia de la selección germana, el NBA tuvo que ser el que desatascara a su equipo de la defensa zonal que planteó Pepu Hernández.

España jugó casi toda la primera mitad con una defensa zonal que dio más de un quebradero de cabeza a los ataques alemanes. Esta forma de defender impidió, en gran parte, ver un duelo NBA entre Gasol y Nowitzki y eso que ambos tenían cuentas pendientes que saldar. Los buenos movimientos del equipo español en defensa hicieron que su rival se tuviera que jugar hasta 17 lanzamientos de tres puntos -por 18 lanzamientos de dos puntos- para intentar romper la zona. La buena noticia para España es que sólo pudieron anotar cinco de ellos.

Los equipos se repartieron aciertos y errores por igual hasta el descanso y ninguno fue capaz de aprovechar los pequeños tirones que dieron en el marcador. Tras el descanso, Pau y Nowitzki se echaron el baloncesto a sus espaldas para empezar a marcar territorio. El alemán perdió los nervios y le propinó un manotazo en la cara a Jiménez.

Gran acierto de Navarro

Con lo que no contaba el equipo germano era con la fiesta del triple que iba a firmar Navarro. El escolta se destapó con tres triples seguidos, más otro que intercaló Cabezas y logró que España se fuera 66-53 (min.34). Ese fue el momento dulce de los españoles que rompieron, por fin, la tremenda igualdad que había presidido todo el encuentro.

De ahí hasta el final, España fue la que lideró el juego ante una Alemania descabezada, porque desde que Nowitzki tuviera el altercado con Jiménez ya no volvió a ser el mismo. Al final su equipo lo pagó y en el último cuarto su equipo sólo anotó 12 puntos.