Robinho despierta al Madrid
Tras una primera parte horrorosa, en la que el Nástic, con un jugador menos, mereció mejor suerte, Robinho despertó al Madrid en la segunda y le llevó a la victoria
Contagiada por el canto al optimismo, creída de las posibilidades de su equipo, dispuesta a compartir el asalto a la Liga, la afición blanca respondió con ilusión a la llamada del club llenando el Bernabéu. La tarde era espléndida, ideal para disfrutar de un buen partido de fútbol, pero el Nástic, penúltimo de la tabla, había llegado a Madrid dispuesto a tutear a los de Capello, sin nada que perder y mucho que ganar, y quiso dominar y jugar al ataque desde el primer minuto.
No esperaba ese tipo de partido la hinchada blanca. No, desde luego, si lo que pretendía el equipo era ilusionar a la parroquia. No podía el Nástic ser el dueño de la pelota y el Madrid esperar atrás para jugar a la contra. Menos mal que apareció "talentito" Cassano a los cinco minutos para darle un nuevo rumbo al encuentro con un estupendo pase entre líneas a Van Nistelrooy, que cayó derribado por César dentro del área. Iturralde pitó la falta fuera y expulsó al ex madridista; correcta la roja, pero se tragó el claro penalti. De cualquier forma, la jugada dejaba a los de Tarragona con diez jugadores con casi todo el partido por delante.
Inmediatamente después, un testarazo de Raúl al que respondió Bizarri con una buena estirada parecía ratificar el cambio de dirección. Pero era puro fogueo, porque el Nástic, a pesar de jugar en inferioridad, era el equipo que más lo intentaba, el que parecía más fresco, con más ideas, más ofensivo, mejor organizado, sobre todo cuando el balón pasaba por los pies del veterano Pinilla, protagonista de las mejores acciones de ataque de su equipo.
En el Madrid lo intentaba Guti, que parecía conectar bastante bien con Cassano, ubicado unos pasos por delante de él, pero insistían los dos en jugar por el centro, Capello se había olvidado de las bandas, y las combinaciones morían antes de llegar a la frontal del área tarraconense, bien defendida por los chicos de Paco Flores. Parecía increíble, terminaba la primera mitad y seguía siendo el Nástic el único equipo que intentaba jugar algo al fútbol sobre el césped de Chamartín. Y el público, como es lógico, protestó.
Robinho cambió las cosas
Salió Robinho por Cassano a ver si podía cambiar el panorama y el Madrid se fue a por el partido aprovechando que el Nástic estaba tomando más precauciones que en la primera mitad. Los de Flores acusaban el cansancio y se habían echado unos cuantos pasos para atrás, algo que aprovecharon los blancos para ganar terreno y fabricar el juego en campo contrario. No es que los de Capello lo estuvieran bordando, pero estaban jugando contra el penúltimo de la Liga, con un jugador menos, y el partido parecía destinado a caer de lado madridista por una simple cuestión de calidad y fuerzas.
Avisó Raúl al culminar una buena triangulación entre Guti e Higuaín, pero Bizarri, acertado durante todo el encuentro, cerró muy bien los espacios e impidió el tanto del capitán. Y a continuación, en otra jugada en el área del Nástic entre Raúl e Higuaín fue Robinho el que, por fin, para alivio de las gradas, puso el choque a favor de viento para el Madrid. Robinho, muy inspirado, envió un derechazo al palo instantes después. El Nástic, que aguantó bien y plantó cara durante los primeros cuarenta y cinco minutos, caía como fruta madura.
Aún así, Capello echó mano de Marcelo y sacó a Higuaín del terreno de juego, no fuera a ser que los de Tarragona fueran a buscar la remontada. Pero daba igual, porque el Nástic estaba muerto, cada vez le resultaba más difícil cerrar los espacios, y aunque jugaba con una dignidad encomiable, el partido ya le estaba resultando demasiado largo. Y llegó el gol raro de Raúl, que culminó un pase de Michel Salgado rematando de cabeza sobre la cabeza de David García, que llevó el balón de carambola a su propia portería.
Mal partido del Real Madrid, al que sólo Robinho pudo despertar en la segunda mitad, pero suma tres puntos muy importantes que le sitúan tercero en la tabla y que mantienen intactas sus opciones para luchar por el título de Liga.
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