El Sevilla arrasa y termina el año líder

Un gran Sevilla FC, intratable como local con un pleno de ocho victorias ligueras, llega al parón navideño como firme líder de Primera División, a la vez que deja muy tocado al Deportivo de La Coruña, que suma nueve jornadas sin ganar y que ya mira de reojo a los puestos de descenso.

El equipo hispalense, que recibirá el próximo enero el trofeo de mejor del mundo en 2006 que otorga el organismo de historia y estadística dependiente de la FIFA, está en una espléndida forma y todo le sale, por lo que va a cerrar el año en todo lo alto de la tabla.

El conjunto coruñés se presentó en el Sánchez Pizjuán con la intención de corregir la última racha de resultados, después de sumar ocho jornadas sin ganar y conseguir tres de los últimos veinticuatro puntos disputados. Para ello, el ex técnico sevillista Joaquín Caparrós incluyó en la alineación al central internacional luso Jorge Andrade, quien volvía al equipo después de nueve meses y medio de baja por una grave lesión, y también al centrocampista Aldo Pedro Duscher, recuperado de una rotura fibrilar.

Estas intenciones de la formación gallega peligraron desde el inicio, porque el Sevilla salió en tromba hacia la meta del israelí Dudu Aouate y el malí Frederic Kanouté, el brasileño Daniel Alves, éste con un remate desde lejos que acabó con el balón repelido por el larguero, y su compatriota Luis Fabiano, con una pelota que se le estrelló en el poste, dispusieron de claras ocasiones. Pareció que el gol local sólo era cuestión de tiempo y éste llegó a los 28 minutos, obra de Kanouté, quien estuvo muy atento tras un rechace de Aouate después de un disparo de Luis Fabiano y logró su decimotercera diana liguera.

El Deportivo, que hasta ese momento había hecho muy poco, tuvo su primera aproximación con peligro a los 34 minutos, pero el portero Andrés Palop resolvió la situación, aunque ese fue un punto de inflexión para que los visitantes tuvieran más el balón en su poder e hicieran, sobre todo a balón parado, trabajar a la defensa rival. En la segunda parte, el equipo de Juande Ramos volvió a tomar el dominio ante un Deportivo que no hizo casi nada por encontrar un nuevo empate.

Ante ello, lo que sucedió fue que volvieron a llegar los goles de un Sevilla desmelenado que casi de forma consecutiva logró el segundo, tercero y cuarto. Kanouté, tras un penalti que le hicieron a Luis Fabiano, el propio brasileño, de un magnífico cabezazo, y Daniel Alves, de un gran libre directo, pusieron el 4-0 en el marcador ante un rival desquiciado por lo que se le vino encima. De ahí hasta el final, el Sevilla no se conformó frente a un adversario entregado y pudo conseguir el quinto en varias ocasiones, aunque del 4-0 no se pasó.