Vinokourov arrebata el liderato a Valverde

El kazako Alexandre Vinokourov, del Astaná, reventó la Vuelta a España con una exhibición táctica, de fuerza y ambición que le permitió convertirse en líder desplazando a Alejandro Valverde, que pasó al segundo puesto de la general, en una etapa que ganó el estadounidense Tom Danielson, del Discovery, aliado del nuevo maillot oro en los últimos kilómetros.

Sorpresa mayúscula en la Vuelta a cuatro días del final, gesta monumental de Vinokourov en la ya inolvidable decimoséptima etapa de la Vuelta, disputada a través de 159 kilómetros entre Adra y Granada, donde se materializó una emboscada de todo el Astaná cuya firma de oro correspondió a "Vino", que se cansó de repetir en los últimos días que iba a atacar y que aún quedaba carrera. Qué razón tenía.

El vencedor en Granada fue el estadounidense Tom Danielson, que también se lo ganó por haber participado desde el kilómetro 60 en la escapada buena, con un tiempo de 4h 09m 57s, el mismo que Vinokourov, su socio en los últimos kilómetros de persecución. La tercera plaza fue para Samuel Sánchez (Euskaltel), a 1m 07s y Valverde, desfondado, entró a 1m 37s junto a Sastre, Kashechkin y Sastre, entre otros. Con la tajada de 12 segundos de bonificación el kazako se fue directo al podio a probarse el jersey oro.

Inolvidable

La hazaña de Vinokourov pasará a la historia de la Vuelta y del ciclismo. Nunca se dio por vencido y anunció que lucharía hasta el último metro. Protagonizó un cambio en la general increíble, producto de un trabajo planificado por su equipo, que desde el banderazo de salida, dando pronto a entender que habría batalla, colocando por delante a Kashechkin y Paulinho.

La exhibición de "Vino" le puso la Vuelta en bandeja, a falta de la cita de La Pandera, donde cambiarán los papeles. El que tendrá que atacar es Valverde, él se limitará a defender y a rematar en la cronometrada de Rivas. El murciano fue relegado al segundo puesto de la general a 9 segundos, Sastre es tercero a 1m 51s y Kashechkin regresó a posiciones avanzadas, cuarto a 2m 14s. Goméz Marchante cierra el quinteto principal a 4m 32s.

Etapa guerrillera

En una etapa guerrillera cien por cien la alta jerarquía del pelotón no se movió hasta las primeras cuestas de Monachil (de primera), cuando el CSC de Sastre empezó a mover el árbol. El pelotón empezó a sufrir bajas en catarata, mientras Valverde y Vinokourov marchaban a rueda, observando como se alejaban Luis Pérez, Gómez Marchante y Kashechkin, éste último como avanzadilla táctica del Astana ante un posible arranque de "Vino".

Pero fue Valverde quien primero atacó en el puerto, en un golpe de autoridad con mensaje de fortaleza y confianza que acusaron Vinokourov y Sastre, que le siguieron a duras penas. Pudieron comprobar el peso de los galones del líder, que no tenía equipo a 7 kilómetros de la cima.

Las alarmas saltaron a 3 kilómetros del alto. Vinokourov, luchador innato, tiró de raza y demarró como un rayo soltando al instante a Valverde, que llevó el peso del ascenso, y a Sastre. El kazako enlazó con su compatriota Kashechkin, que iba por delante con Marchante, y ya eran dos contra uno. El movimiento del jefe del Astaná metió miedo en el cuerpo al Illes Balears.

Descenso vertiginoso

En la cumbre de Monachil pasó primero Danielson, que disputaba la "otra" etapa, a continuación Kash, Vino y Marchante a 35 segundos, y Valverde, solo, con el maillot abierto de para en par, a 45. En la bajada hubo de emplearse a fondo el líder, a 85 por hora, para evitar que se consumara la emboscada kazaka.

Cuando enlazó, y sin tiempo para darse un respiro, Vinokourov volvió a soltar otro latigazo, a casi 20 kilómetros de meta. Un verdadero gladiador que cumplirá el sábado 34 años, infatigable, de ambición ilimitada. Valverde se quedó con Kashechkin y Marchante, obligado a tirar a saco, sin relevo alguno de sus compañeros de descenso.

Reparto pactado

A 5 de meta Vino alcanzó a Danielson y Valverde perdía 55 segundos, en declive físico por la agotadora persecución. Zozobra para el Illes Balears. Los dos hablaron para colaborar y no hubo discrepancia alguna. Tom y Vino contra el líder, para uno la etapa y para el otro 12 segundos de bonificación y tal vez la Vuelta.

Dicho y hecho, a la vera de La Alhambra, entró el zar del ciclismo kazako a toda mecha, sin mirar atrás, crecido, en compañía del amigo Danielson, que estrenaba palmarés, como estrenó jersey amarillo Vinokourov en una de las grandes. "Me quería demostrar que podía luchar en una carrera como esta". Si es por eso, "Vino" puede dormir tranquilo. Es un campeón.

Mañana se disputa la decimoctava etapa entre Granada y La Pandera, de 153,1 kilómetros, con los altos de Las Encebras (de tercera) y de Los Villares (de segunda) antes de afrontar el ascenso final al puerto jienense, con sus 8,3 kilómetros de 6,4 por ciento de pendiente media y 15 de máxima. Ultimo combate en montaña para los favoritos antes de la cronometrada de Rivas.