Di Luca vence en la quinta etapa y es el nuevo líder
La etapa de hoy, de 178 kilómetros de recorrido, ha acabado en el Alto de La Covatilla
El italiano Danilo Di Luca, del Liquigas, ha ganado hoy la quinta etapa de la Vuelta a España, disputada entre las localidades de Plasencia y La Covatilla, de 178 kilómetros de recorrido. Di Luca ha invertido un tiempo de 5h:02:25, seguido del eslovaco Janek Brajkovic, del Discovery Channel, que ha terminado segundo, y ha aventajado en cinco segundos al tercero, el kazajo Kashechkin, del Astana. El español José Angel Gómez Marchante ha entrado cuarto a 14 segundos y Alejandro Valverde y Carlos Sastre a 21.
Di Luca libró un bonito pulso con el joven esloveno de 22 años Janez Brajkovic, del Discovery, campeón del mundo contrarreloj sub 23 en 2004. En los últimos kilómetros del ascenso final impuso su experiencia para alzar los brazos en la cima salmantina, donde sucedió en el palmarés al español Santi Blanco y al colombiano Félix Cárdenas. El jefe de filas del Liquigas, ganador del Pro Tour el año pasado, coronó la cima invirtiendo un tiempo de 5h.02.25 en el trayecto de la quinta etapa que unió Plasencia con La Covatilla, con Brajkovic a su rueda y el kazako Andrey Kashechkin, del Astana, tercero a 7 segundos. A continuación pasaron los españoles José Angel Gómez Marchante (Saunier), a 15 segundos, y Carlos Sastre (CSC) y Alejandro Valverde (Illes Balears) juntos a 22. El ramillete de favoritos sufrió una seria merma en la primera cita clave de la presente edición, con considerables daños colaterales. Samuel Sánchez perdió 39 segundos, Iban Mayo 1.44, Vinokourov 2.13, Denis Menchov, ganador de la Vuelta 2005, 3.37, Pereiro 5.38 y Haimar Zubeldia 6.10.
Di Luca, el nuevo líder, brilló sobremanera en 2005 con sus triunfos en la Flecha Valona, Amstel Gold Race, Vuelta al País Vasco y 2 etapas en el Giro. No vino a luchar por la general, pero subió al podio a ponerse el maillot oro, en lugar del noruego Thor Hushovd, que se hundió en las rampas de La Covatilla. Brajkovic le sigue a 4 segundos y Kashechkin a 18, dos corredores a tener en cuenta. Sastre, cuarto a 29 segundos y Valverde, sexto a 36, se hicieron acreedores a su condición de candidatos al triunfo final, ya con sus teóricos rivales directos alejados tras ofrecer síntomas de debilidad. Entre ellos se coloca como quinto Gómez Marchante, a 35 segundos de Di Luca. La jornada, otra vez marcada por el rigor del termómetro, fue movida desde el principio y no defraudó las expectativas, pues los favoritos mostraron sus cartas y los aspirantes a ser la revelación asomaron la cara.
Después de los intentos iniciales de Carlos Barredo y Luis León Sánchez (Astana), 16 corredores se adelantaron formando la primera fuga de la etapa. Ahí se metieron el rey de la montaña del Tour, el danés Rasmussen, con Sergio Paulinho, Landaluze, Vladimir Gusev, Joaquín Rodríguez, Xavier Florencio, Angel Gómez, David Arroyo y Bettini, entre otros. Un grupo que hizo de avanzadilla en los tres primeros puertos del menú del día. Angel Vallejo, del combativo Relax, coronó en cabeza El Piornal (1a), un puerto de 13 kms, tendido, no demasiado duro en el que los hombres del CSC tomaron posiciones para proteger a Carlos Sastre. El Puerto de Honduras (1a), de 17 kms y más duro que el anterior anotó en su cima el nombre del ruso del Discovery Vladimir Gusev. El pelotón tenía un retraso de más de 4 minutos. En La Lagunilla (2a), puerto inédito, de 11 kms, más duro que los anteriores y digno de superior categoría, atacó el luxemburgués Benoit Joachim y redujo el grupo cabecero a 8 unidades, con Rasmussen, Caucchioli, Elías, Gusev, Landaluze, Paulinho y Arroyo en la persecución.
El hombre del Discovery fue atrapado antes de la cima, por donde abrió paso José Miguel Elías (Relax). Los escapados llegaron a pie de La Covatilla aún con 6 corredores. El portugués Paulinho, subcampeón olímpico y David Arroyo (Balears) pronto rompieron las hostilidades y dividieron el grupo, pero sus esperanzas se ahogaron desde el momento en que el CSC con Iñigo Cuesta movió el grupo de los favoritos. Con un ritmo infernal, Cuesta acabó rápido con la resistencia de los Pereiro, Menchov, Mayo, Vinokourov y Zubeldia. Solo aguantaban en estrecho marcaje Sastre y Valverde. Pero fueron Di Luca, Brajkovic y Kashechkin, junto a Gómez Marchante los que rompieron la etapa en vanguardia. La experiencia permitió que el treintañero Di Luca se anotara la segunda victoria en la Vuelta. Ya ganó en Alcoy en 2002, y ya puede pensar en su gran reto: el Mundial.
Mañana se disputa la sexta etapa entre Zamora y León, de 177 kms, jornada de transición propicia para el lucimiento de esprinters y aventureros. Los favoritos se reservaran para la montaña de El Morredero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.