Villa le quita dos puntos al Zaragoza en su vuelta a La Romareda
El Zaragoza jugó una primera parte excepcional pero en la segunda terminó agobiado por el Valencia
Villa volvió a La Romareda haciendo lo mismo que cuando se fue: marcar goles. Un tanto suyo empató un encuentro que resultó un espectáculo en la primera mitad y se diluyó en la segunda. El Zaragoza dejó una buena imagen en su debut ante su público mientras que el Valencia sigue dando muestras de ligera mejoría.
No pudo el Zaragoza brindarle una victoria a su afición tras el buen primer tiempo realizado por los de Víctor Muñoz. Villa amargó el día a su ex compañeros y marcó el tanto del empate (2-2) a los dos minutos de saltar al césped.
Quien inventó el fútbol tuvo que pensar en primeras partes como la que se vio en La Romareda. Juego directo, sin especulaciones, rápido y vertical, sobre todo por parte del Zaragoza, fue lo que se pudo disfrutar en la primera mitad. Todavía estaban acomodándose los suplentes en sus asientos, cada jugador cogiendo su marca, cuando Angulo adelantó al Valencia.
Hace no demasiado tiempo, cuando un equipo se ponía por debajo en el marcador ante el Valencia, significaba intentar un imposible, chocar contra un muro, contra un equipo muy bien plantado y que en una contra te mataba definitivamente. Por suerte para el Zaragoza y para el partido, este Valencia no es aún como aquél. Si a eso se le une un equipo que juega muy bien al fútbol, como ayer lo hizo el Zaragoza, la remontada es posible.
De esa forma, jugando un fútbol alegre, de desborde, vertiginoso, el Zaragoza empató en el minuto 7 por mediación del velocísimo Ewerthon, y antes de la media hora ya iba por delante merced a un cabezazo de Cani. Gran mérito también en los goles tuvo el lateral Delio Toledo, autor de los dos pases. El Valencia estaba tocado, a Baraja y Albelda se le acumulaba el trabajo y lo mejor que podía pasarle a los "ché" era que llegara el descanso sin más goles en contra.
Aparece Villa
En el segundo tiempo, el partido no fue el mismo. Lo lógico era que bajara el altísimo ritmo y así sucedió. El encuentro se trabó, el Zaragoza ya no sentía la necesidad de jugar a toda mecha, mientras que el Valencia de Quique aún no está lo suficientemente hecho como para desplegar un gran juego.
Sin embargo, el Valencia se guardaba aún un arma que conocen muy bien en La Romareda. Quique sacó al campo a Villa y el "guaje" tardó sólo dos minutos en demostrar por qué le ficharon y por qué era querido en Zaragoza. Un balón largo de Ayala, un bonito toque de primeras de Mista y una definición de disparo cruzado de Villa empató el encuentro.Si el Zaragoza jugó mejor que el Valencia la mayor parte del partido, los valencianos demostraron un mejor físico en la recta final del choque. Crecidos por el gol del empate, empujaron e incluso dispusieron de alguna ocasión para llevarse una victoria que no habría resultado justa, pero ni Rufete ni de nuevo Villa acertaron.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.