Cocu hace soñar al PSV
El Olympique de Lyón domina al equipo holandés pero cede un empate a uno en casa
Las previsiones señalaban al Olympique de Lyón como favorito en la eliminatoria y, por el momento, el conjunto francés está cumpliendo. Basado en juego directo y en su gran talento ofensivo, los de Le Guen dominaron al PSV y no permitieron que los holandeses crearan ocasiones claras. En el minuto 7, Juniho avisó con un disparo desde el centro del campo que se marchó ligeramente por encima de la portería de Gomes. Un anticipio de lo que llegaría más tarde, puesto que Malouda recogió un balón suelto en el área y logró el primer tanto del partido no sin algo de ayuda por parte del portero del PSV. Salvo un gran remate de Essien de cabeza que detuvo Gomes, las ocasiones brillaron por su ausencia. El dominio era galo, aunque no habría que descartar la sorpresa y el empate de los de Hiddink en la segunda mitad.
El Olympique salió conservador y se dedicó a controlar el resultado a la espera del pitido final. Una actitud que no sorprendió al PSV, muy batallador y que nunca se conformó con el 1-0. Govou, solo ante Gomes, no aprovechó la mejor oportunidad de los locales en toda la segunda mitad y al final el Lyón lo acabó pagando. Cocu enganchó un disparo desde fuera del área, poco potente pero colocado, que sorprendió a Coupet y acabó en el fondo de la portería. Un tanto muy importante, puesto que los de Eindhoven encarrilan la eliminatoria a falta del partido de vuelta en su campo. A la desesperada, el Olympique trató de marcar el segundo, pero ya era demasiado tarde y el PSV aguantó sin problemas.
Parecía que el Olympique de Lyón, tras su gran temporada en Europa, no tendría problemas para ganar al PSV y asegurarse el pase a las semifinales. Sólo en teoría. El equipo francés dominó la primera mitad, se adelantó en el marcador y trató de consevar el resultado en demasía. En una jugada aislada, los holandeses, muy batalladores, lograron la igualada gracias a un tanto de Cocu. Todavía queda el partido de vuelta en Eindhoven, pero los holandeses han demostrado que son un equipo rocoso, con mucha ambición y difícil de ganar.
