Safin rompe la racha de 26 victorias consecutivas de Federer

Roger Federer no es invencible. El suizo ya ganó la final el pasado año y llevaba una racha de 26 victorias consecutivas. El número uno del mundo no perdía un partido desde el pasado 15 de agosto y no había cedido un set este año, pero se ha encontrado a un Marat Safin muy luchador que, después de cinco sets épicos, se ha plantado en la final del Abierto de Australia.

Safin ha festejado de esta manera su 25 cumpleaños. En cuatro horas y 28 minutos, después de salvar una bola de partido en el desempate de la cuarta manga, Safin ha derrotado a Federer en un épico encuentro por 5-7, 6-4, 5-7, 7-6 (6) y 9-7. Fue un partido para la historia de este torneo, pleno de pasión, de intercambios espectaculares y de emoción. Su victoria es una especie de revancha con respecto a la final del pasado año, en la que el ruso estaba físicamente muerto y no pudo hacer frente al suizo. Precisamente hoy ha sido Federer el que ha tenido más problemas físicos, e incluso tuvo que ser atendido en varias ocasiones en la pista, pero conectó 22 saques directos y pudo ganar si hubiera aprovechado una bola de partido en el desempate.

Aunque queda la final, Safin ya ha saboreado su mejor victoria, ya que no vencía a Federer desde hace tres años. En la final se enfrentará al vencedor de la semifinal que se disputa mañana viernes entre el estadounidense Andy Roddick y el australiano Lleyton Hewitt. Es la primera vez que Hewitt alcanza las semifinales del Abierto de Australia, y para ello volvió a dar una prueba más de su carácter ganador al superar en cinco sets al argentino David Nalbandian. Hewitt estuvo tres veces a dos puntos de la derrota ante Nalbandian en el quinto set, pero en una su servicio le sacó del apuro y en las otras dos su garra, y logró vencer por 6-3, 6-2, 1-6, 3-6 y 10-8. Roddick se colocó en semifinales tras abandonar el ruso Nikolay Davydenko en el tercer set debido a una insolación.