Un niño argentino rechaza una oferta del Barça por el miedo de su familia a un secuestro

La familia del niño futbolista argentino Erik Lamela, de 12 años, ha rechazado una oferta del Barcelona y continuará jugando en el River Plate, según ha informado su presidente, José María Aguilar, a los miembros de la directiva. El club español había ofrecido a los Lamela su traslado a la Ciudad Condal y la residencia para que el pequeño delantero jugara en las filas de sus equipos infantiles a cambio de una vivienda y trabajo para sus padres y el pago de sus estudios y de sus hermanos, de 8 y 14 años.

La madre del menor, Miriam, ya había afirmado que no estaba convencida de que lo mejor para su hijo y su familia fuera irse a Barcelona, por cuestiones afectivas y porque temía al desarraigo. "A lo mejor esto hubiera sido bueno que pasara dentro de dos, tres o cuatro años, cuando el niño tenga 15 o 16. A mí nadie me asegura de que vaya a jugar al fútbol y que vaya a ser un profesional. Mis hijos saben que lo primero que tienen que pensar es en la escuela, y después en lo demás", explicó Miriam, que quiso dejar claro que River Plate le había ofrecido a su hijo "un contrato a futuro, para cuando Erik tenga la edad adecuada, porque es muy pequeño" y becas para la educación de sus hijos.

La madre del niño ha desmentido tajantemente que el Barcelona haya ofrecido por el traspaso 120.000 euros anuales. En el River Plate, los dirigentes temieron que el caso Lamela pudiera afectar la relación del club con los padres de centenares de niños que juegan en el club y que podrían exigir acuerdos similares al de Lamela. Erik y sus padres estuvieron dos semanas en Barcelona recientemente, invitados por el club azulgrana, y el niño conoció las instalaciones del club. "Al principio el chico estaba entusiasmado, pero después no tanto", ha comentado su madre. La mujer ha manifestado su temor por el "revuelo" que hubo tras la oferta del Barcelona a su hijo y teme que "alguien pueda creer que hay mucho dinero en el medio" y secuestrarle.