La jornada deportiva se suma al duelo nacional
Los actos de duelo por los atentados del pasado 11 de marzo se han trasladado a todos los eventos deportivos de la jornada. Estadios, canchas y otros espacios abiertos han albergado los homenajes a las 200 víctimas que de momento han dejado los ataques terroristas contra la red ferroviaria del sur de Madrid.
El acto más multitudinario ha tenido lugar en el estadio Santiago Bernabéu, donde los jugadores del Real Madrid y el Zaragoza han saltado al campo portando una gran bandera blanca con lazo negro. Desde la grada, más banderas y carteles recordaban a las víctimas y a los casi 1.500 heridos.
Abrazo en Vallecas
Los jugadores del Rayo Vallecano y del Leganés se fundieron en un abrazo sobre el círculo central del estadio de Vallecas, instantes antes del clásico madrileño de Segunda, en una estampa de gran emotividad.
Antes de empezar el partido, sobre el sonido de fondo de una marcha fúnebre, los espectadores guardaron un minuto de silencio y a su conclusión prorrumpieron en gritos de "¡Asesinos, asesinos!". En el fondo norte, una gran pancarta negra pedía "odio eterno a los culpables".
"No estamos todos, faltan 200", rezaba otra gran pancarta en el estadio de Vallecas, en un barrio muy castigado por el terrorismo.
Llanto de un árbitro
Ignacio Fernández Hinojosa, encargado de arbitrar el partido de Segunda División que disputan en el estadio Nuevo Mirador el Algeciras y el Alavés, rompió a llorar durante el minuto de silencio que se guardó en los prolegómenos en memoria de las víctimas de los atentados de Madrid.
El colegiado, natural de Madrid y que el próximo lunes cumplirá 40 años, no pudo aguantar la emoción y lloró desconsoladamente por lo sucedido en su ciudad el pasado jueves.
Fernández Hinojosa, que incluso tuvo que ser consolado y animado por varios jugadores, demoró el inicio del encuentro algunos instantes hasta que se recuperó de la emoción.
