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La Fiscalía Anticorrupción acusa a Gil de defraudar más de 12 millones de euros a Hacienda

Jesús y Miguel Ángel Gil declara en la Audiencia Nacional que el dinero que pagaron a la empresa Van Doorn era para fichajes

La Fiscalía Anticorrupción ha presentado en la Audiencia Nacional una nueva querella contra Jesús Gil en la que acusa al ex presidente del Atlético de Madrid de defraudar 12,8 millones de euros a Hacienda. El texto de la querella asegura que la gestión de Gil "parece ser particular y deliberadamente perjudicial" para el club.

Anticorrupción asegura en su escrito que Gil y su hijo Miguel Ángel, director general del Atlético, "vienen endeudando ilimitadamente a la entidad sin previsión de futuro, impagando sistemáticamente sus obligaciones tributarias y abocándola a una situación de crisis financiera prácticamente irreversible".

Precisamente esta mañana, el ex presidente del Atlético de Madrid, Jesús Gil, y su hijo y director general del club, Miguel Angel, han declarado en la Audiencia Nacional dentro de otro juicio en el que se investiga el pago de grandes cantidades de dinero por jugadores cuyo precio de mercado era bajo. Ambos han explicado hoy que los más de 60 millones de euros pagados por el Atlético a la empresa holandesa de intermediación Van Doorn eran para esos fichajes.

Durante su declaración como imputado ante el juez Juan del Olmo, Gil mostró su convicción de que el destino de ese dinero había sido la compra de jugadores, aunque aseguró que él nunca tuvo contacto con la sociedad holandesa y remitió al magistrado a las explicaciones que a continuación iba a dar su hijo, responsable de las operaciones.

En su comparecencia, Miguel Ángel Gil dijo que el Atlético era sólo "uno de los 11 clubes españoles" que habitualmente contratan jugadores a través de Van Doorn International Management B.V., sociedad a la que se dirigía una vez que el entrenador del equipo recomendaba un fichaje. Esta situación se produjo, según Miguel Ángel Gil, cuando Radomir Antic quiso fichar a Rade Bogdanovic o cuando el italiano Arrigo Sacchi le pidió que se hiciera con los servicios del argentino Christian Díaz. Según el director general del Atlético, la mediación de Van Doorn consistía en que esta sociedad financiaba los fichajes, algo que encarece la compra del jugador, pero permite a los clubes pagar a plazos.

Del Olmo tomó hoy declaración a los Gil después de haber estado este martes y miércoles pasados en Holanda interrogaron a varios responsables de Van Doorn para recabar más información. Este asunto es una pieza que quedó desglosada del sumario del caso Atlético, por el que Gil fue condenado el pasado 14 de febrero a tres años y seis meses de prisión por los delitos de apropiación indebida y estafa, a la espera de recibir cierta información solicitada a Holanda mediante comisión rogatoria.

Durante la instrucción de la causa, el fiscal anticorrupción Carlos Castresana concluyó que "una parte sustancial" de los más de 60 millones de euros que el Atlético de Madrid había remitido a Van Doorn desde 1996 no se correspondía con la adquisición de jugadores y aseguró que se trataba de "fondos cuyo destino final no consta".

El fiscal manifestó en un escrito dirigido al Juzgado en abril de 2000 que "se ha podido conocer, por las reclamaciones de pago de la sociedad holandesa Van Doorn International Management B.V., que los imputados han comprometido desde 1996 pagos por el fichaje de siete jugadores de la plantilla por importe superior a los once mil millones de pesetas". De esa cantidad, según el ministerio público, "más de diez mil millones han sido remitidos a Holanda, de los que una parte sustancial no se correspondería en realidad con la adquisición de jugadores, sino con otros negocios jurídicos que no han querido revelar, fondos cuyo destino final no consta".

Castresana explicaba que "por los derechos del jugador Bogdanovich se han satisfecho 2.935 millones de pesetas cuando su precio real parece no haber excedido de 150 millones. Por Andrei Frascarelli se han pagado 1.940 cuando su coste fue aparentemente de 550 millones; por Bejbl se han satisfecho 1.328 millones cuando su coste parece no haber superado los 500 millones". En total, son 11.227.807.356 pesetas "de los que se ignora qué parte se ha pagado efectivamente por los jugadores".

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