Arranca la final de la Liga ACB entre Unicaja y Tau en una confrontación inédita

Ni Real Madrid ni Barcelona. Muertos los viejos jerarcas, Unicaja y Tau dirimen quién es el nuevo rey de la Liga ACB. Una final inédita en la que andaluces y vascos aparecen por segunda vez, por primera frente a frente, y en la que ambos rehuyen el papel de favorito por más que la ventaja de campo y la lesión a última hora del base Chris Corchiani concedan cierta ventaja a los malagueños.

Las apuestas dan como favorito al Unicaja. Entrenadores y aficionados se han decantado por la fortaleza física del Unicaja, que ganó el factor cancha al finalizar segundo en la fase regular. Pero los protagonistas no quieren pronunciarse. Berni Rodríguez y Frederic Weis, por el Unicaja; y Elmer Bennett y Luis Scola, por el Tau, han coincidido en que la final será "dura, física y muy larga", conforme al estilo de ambos equipos.

El Unicaja tratará de imponer su brillante juego exterior y el Tau su creatividad y fortaleza dentro de la pintura. El que imponga su estilo de juego tendrá buena parte de la eliminatoria resuelta. El duelo Bullock-Bennett también resultará clave, aunque la baja de última hora de Corchiani puede hacer mucho daño al juego del Tau. El base estadounidense sufrió una inoportuna lesión "en la última jugada del entrenamiento del martes", según relató Ivanovic. Corchiani padece una rotura en el quinto metacarpiano del pie y será baja durante 45 días. "Es una pena y una baja sensible. Me da rabia por él, que se perdió la final de la Euroliga la pasada temporada y ahora la de la ACB", relató el técnico montenegrino del Tau.

El Tau queda así seriamente debilitado en una posición reforzada por el Unicaja con el fichaje de Bullock, pensado precisamente para nivelar la teórica superioridad vitoriana. Ivanovic deberá sobreponerse a tener que contar con un hombre que no goza de su confianza, el griego Harissis, como sustituto de Elmer Bennett en momentos puntuales.

A pesar de la baja de Corchiani, Ivanovic ha pronosticado una final muy larga que se decidirá "por pequeño detalles". "En algo nos podremos sorprender, pero la sorpresa en esta final no podrá durar mucho tiempo, y no creo que eso pueda decidir. Creo que la clave va a estar en que un jugador pueda tener un buen día, y sobre todo en una gran defensa colectiva durante cuarenta minutos", comentó.

Duelo entre maestro y discípulo en los banquillos

Mejor le han rodado las cosas al Unicaja en lo que al físico se refiere. Los malagueños no tienen bajas, aunque Darren Phillip no se ha entrenado en los dos últimos días ya que el lunes por la tarde le extrajeron una uña del pie infectada. El ala-pívot inglés sufre fuertes dolores pero, aunque renqueante, estará listo para jugar.

Pero, tanto o más que en su plantel, en el club malagueño se confía en su aguerrida afición. Una vez más, y van... el pabellón José María Martín Carpena (donde Unicaja no pierde desde hace seis meses) volverá a quedarse pequeño para acoger un duelo espectacular que tendrá un grado más en los banquillos.

El técnico serbio del Unicaja, Bozidar Maljkovic, desea vencer ante su homólogo, compatriota, amigo y discípulo, Dusko Ivanovic, al que dirigió cuando éste último jugaba en la mítica Jugoplastika de finales de los 80 y quien, ya como técnicos los dos, le ganó cuando dirigía al Limoges francés en la final de la Copa Korac, hace tres temporadas, y en la semifinal de la Copa del Rey, esta campaña, que luego sirvió para que el Tau se proclamara campeón.