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Columna
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La rebelión de las piernas de Fox News

No hay moraleja fácil en esta historia, que tampoco termina con una victoria inequívoca

Sergio del Molino

Para las presentadoras de Fox News, la revolución fue ponerse unos pantalones. Antes que el logotipo, la imagen corporativa de la cadena fueron las piernas de mujeres rubias e imponentes en minifalda. Roger Ailes eliminó las mesas de los platós o las redujo a su mínima expresión. También acabó con los planos cortos de “busto parlante” para enseñar a las presentadoras de cuerpo entero. Cuando los realizadores abusaban de los planos demasiado cerrados, llamaba enfurecido a la sala de control y gritaba: “¡Piernas! ¡No veo las piernas! ¡Abre el plano!”.

Hoy sabemos que Ailes no fue solo un iluminado que encandiló a los garrulos más facciosos de su país difundiendo mentiras a través de tías buenas rubias, sino un pervertido que acosaba y violaba a sus trabajadoras. La película El escándalo narra con elegancia e incomodidad una historia sucísima que se prestaba al esperpento o al melodrama. Jay Roach consigue algo muy difícil: que entendamos bien la hondura de unos personajes a los que la televisión había reducido a estereotipos. Para los espectadores de Fox News, solo eran piernas; para los progresistas, solo eran barbies al servicio de la reacción.

La rebelión de las presentadoras de Fox News está protagonizada por víctimas que no encajan en el molde del martirologio. Como bien expresa el personaje de Megyn Kelly (soberbia, gigante Charlize Theron), aquello fue un juego complejísimo de poderes y ambiciones. Kelly es inteligente y valiente, alguien que no se arredra al plantarle cara al mismísimo Donald Trump. No es una damisela indefensa a merced del poder omnímodo de la bestia, pero, a la vez, también lo es.

No hay moraleja fácil en esta historia, que tampoco termina con una victoria inequívoca. Ailes está muerto, y Trump, en el poder. Y, sin embargo, los ecos de esta rebelión resuenan y perduran fuera de los platós.

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Sobre la firma

Sergio del Molino
Es autor de los ensayos La España vacía y Contra la España vacía. Ha ganado los premios Ojo Crítico y Tigre Juan por La hora violeta (2013) y el Espasa por Lugares fuera de sitio (2018). Entre sus novelas destacan Un tal González (2022), La piel (2020) o Lo que a nadie le importa (2014). Su último libro es Los alemanes (Premio Alfaguara 2024).

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