_
_
_
_
_
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Dos estilos de series

'Innocent' y 'Fleabag' consiguien, siendo tan diferentes, el mismo objetivo

Ángel S. Harguindey
Lee Ingleby en 'Innocent'.
Lee Ingleby en 'Innocent'.

Son dos formas de entender el entretenimiento. Innocent (Calle 13) se ajusta a la ortodoxia establecida: presentación, nudo y desenlace. Cuatro capítulos en los que el protagonista (Lee Ingleby) trata de rehacer su vida tras pasar siete años en prisión acusado de haber matado a su esposa, condena que es anulada por un error judicial. Fleabag (Amazon), por su parte, nos habla en ocho capítulos de algo menos de media hora cada uno, de las andanzas de una treintañera desnortada, o como diría Almodóvar "como vaca sin cencerro", por un Londres contemporáneo. Es la estupenda Phoebe Waller -Bridge, autora de la obra teatral homónima en la que se basa la serie. Hay presentación, presentación y presentación sin nudo ni desenlace, incluso con un constante dirigirse la protagonista a la cámara para, de un lado, distanciar la acción y, de otro, hacer cómplice al espectador de sus mordaces comentarios, generalmente referentes al sexo, gimnasia a la que es muy adicta.

Las dos series tienen en común su origen británico y esa estupenda medida de pocos capítulos, o breves, que exigen a sus creadores dejar de lado los vericuetos generalmente innecesarios salvo para justificar la tradicional duración de los proyectos, entre 10 y 13 capítulos.

Nuestro inocente está decidido a encontrar al auténtico culpable de la muerte de su esposa y recuperar a sus dos hijos. Policía, familiares y amigos componen una trama en la que, como suele ser frecuente en los relatos policíacos, surgen posibles y diferentes culpables hasta llegar a conocer la verdad. Nada nuevo pero a veces se agradece lo establecido, mal que les pese a Puigdemont y a Torra.

Nuestra nada inocente dama londinense por su parte, regenta un café ruinoso, se acuesta con quien le apetece, tiene una lengua viperina y se ríe de casi todo lo establecido, incluido un retiro espiritual de fin de semana en los que los asistentes, previo pago, buscan desesperadamente la paz interior. Naturalmente la expulsan.

Lo dicho: dos formas de entender el entretenimiento que consiguen lo buscado: entretener.

Estrenos de la semana Consulta el calendario completo
28lunes
29martes
1994
Movistar +
Temporada 3
30miércoles
31jueves
1viernes
See
See
Apple TV+
Estreno
2sábado
3domingo

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_