Europa también sabe hacer series
Cadenas españolas estrenan algunos de los últimos grandes éxitos producidos en Francia o en Bélgica
Es complicado huir de la omnipresencia de las series estadounidenses. Como grandes exportadores de entretenimiento en Occidente, sus ficciones televisivas son las que reciben mayor atención por parte de las cadenas y de los espectadores. Sin embargo, no siempre hace falta fijarse en Estados Unidos para encontrar títulos que merecen la pena. Algunas producciones europeas han logrado abrirse paso en el panorama televisivo español. Es el caso de las francesas Última oportunidad, que arrancó el martes en La 1, Los desenterrados de Le Treport, de estreno en breve en Cuatro, o la belga Enemigo público, que Movistar Series Xtra emitirá en septiembre.
Para Lorenzo Mejino, crítico de series y buen conocedor de la ficción internacional, este interés de las cadenas por la producción europea "nace del paso del espectador de ser pasivo a ser más activo, buscando en las redes sociales propuestas diferentes a las habituales anglosajonas", fenómeno que ha sido aprovechado por los canales que "han visto un posible nicho de mercado y han entrado en él". Algunos precedentes están en la francesa Les Revenants, la danesa Borgen o la sueco-danesa Bron/Broen, que llegaron a España cuando el boca a boca seriéfilo en foros de Internet y blogs ya había despertado el interés de muchos espectadores por ellas.
Estas historias no tienen fácil competir con las que proceden del mundo anglófono. Sin embargo, cuentan con elementos que les debería dar cierta ventaja. "Nos muestran historias y personajes que son mucho más cercanos a nuestro entorno que las estadounidenses: la política de Borgen, la corrupción de 1992 o los mafiosos de Gomorra están llenos de referencias perfectamente trasladables a nuestra realidad. Potenciar esos hechos diferenciales ha sido la clave del éxito al mostrar que es posible una mirada televisiva diferente a la hegemónica estadounidense, sin que sea excluyente", explica Mejino.
Última oportunidad, que La 1 emite en horario de máxima audiencia, ha llegado a España tras cosechar un gran éxito de audiencia en Francia. Basada en el best seller de Harlan Coben, esta historia contada en seis capítulos sigue la historia de la doctora Alice Lambert, cuya vida sufre un vuelco cuando, tras un asalto a su casa, termina gravemente herida, su marido asesinado y su hija de seis meses secuestrada. También de Francia proviene el drama policíaco que estrenará Cuatro Los desenterrados de Le Treport, que aprovecha los paisajes de Normandía y la influencia de las series nórdicas para narrar la investigación de un extraño suceso: varias tumbas son profanadas y los cadáveres aparecen en pisos piloto de la zona.
De Bélgica procede Enemigo público, uno de los grandes estrenos de Movistar Series Xtra para septiembre. En ella, un hombre regresa a su pueblo tras cumplir veinte años de condena por asesinar a varios niños. Sus vecinos no le reciben con demasiado entusiasmo, sobre todo después de que una niña desaparezca. Enemigo público se une a la lista de ficciones europeas con las que Movistar está reforzando su parrilla y que este verano ha incorporado la noruega Absuelto y la franco-británica Spotless. En octubre se unirán la comedia Love, Nina y el thriller de terror Los vivos y los muertos, ambas británicas.
"En los últimos años, la subida de calidad en las series europeas es evidente gracias a la entrada de muchas televisiones públicas y productoras privadas con inversiones importantes encaminadas a fomentar el talento y recuperar el dinero con las ventas internacionales", dice Mejino, quien también recuerda que no es oro todo lo que reluce y cita los casos de las francesas Marseille o Sección Cero como ejemplos de "grandes fiascos", al menos en cuanto a la respuesta de la crítica.
Títulos por llegar
En realidad, siempre ha habido series europeas de calidad, y muchas de ellas se han emitido en España. Es el caso de Wallander, Berlin Alexanderplatz o Romanzo Criminale, como apunta Lorenzo Mejino. Pero la gran cantidad de ficción televisiva que se produce (y exporta) en los últimos años en Estados Unidos hace que las historias europeas tengan más complicado hacerse un hueco. Entre los últimos estrenos en países europeos que todavía no han llegado a España, este experto en series extranjeras destaca la islandesa Trapped, que ha cosechado buenas audiencias en Francia y Reino Unido, la sueca Springfloden, la belga La Tréve y la francesa Baron Noir.
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