El ‘buenismo’ toma la pantalla

Allí donde no llega el Estado de bienestar está dispuesta a llegar TVE. La televisión pública intenta tapar desde sus pantallas los agujeros que están dejando los recortes sociales en capas cada vez más extensas de la población. Programas que recaudan dinero para necesidades básicas o para la investigación de enfermedades raras se mezclan con otros que llaman a la movilización ciudadana o buscan financiación para emprender negocios. Espacios con aroma buenista que han provocado el rechazo de organizaciones sociales.

La diana de las críticas ha sido el espacio vespertino de La 1 Entre todos (bautizado por la prensa francesa como el programa de los pobres), que muestra cada tarde un puñado de dramas familiares en los que se reclama dinero para sufragar un tratamiento médico costoso o para comprar un frigorífico que alivie una situación económica precaria. Algunas entidades afirman que, con estas acciones, la televisión pública promueve la sustitución de los derechos sociales por la caridad.

Pero TVE parece decidida a pasar el cepillo entre sus espectadores. La próxima cita será un telemaratón para recaudar fondos destinados a la investigación de enfermedades raras. Este formato parecía desterrado de la cadena pública, aunque en la memoria quedan las galas en favor de la FAO presentadas por Anne Igartiburu o aquellas que conducía Raffaella Carrá para apadrinar niños.

Para el telemaratón que se avecina, RTVE ha firmado un acuerdo con el Ministerio de Sanidad, la Fundación Isabel Gemio, la Asociación Española de Enfermedades Neuromusculares y la Federación Española de Enfermedades Raras. “Desde RTVE estamos convencidos en dar cobertura a los pacientes y sus familiares, en tratar la situación en la que se encuentran los afectados y en concienciar al conjunto de la sociedad sobre esta problemática”, dice la corporación.

Algunas de las iniciativas de la cadena pública han sido tildadas por el Consejo General de Trabajo Social como “beneficencia constitucional”. En La 2 aterrizó ayer Efecto ciudadano, dirigido por Miguel Ángel Tobías y patrocinado por la Fundación ONCE con el objetivo de promover el apoyo entre ciudadanos. Muestra para ello historias de personas que ayudan a otras personas, aunque en este caso poniendo el acento en quien presta la ayuda y no en quien la recibe. Tobías, militante del PP y speaker en algunas de las convenciones del partido, defiende este tipo de programas: “Son imprescindibles, la televisión es el medio de comunicación más potente que existe, y debe destinar parte de su programación a temas que interesan a mucha gente que está sufriendo”.

La primera entrega ha mostrado una iniciativa social en Valencia que ayuda los domingos a más de 100 personas y a un matrimonio barcelonés que ha cedido dos años una vivienda vacía a una pareja que hubo de entregar la suya al banco. Para Tobías, Efecto ciudadano pretende “generar conciencia social” y poner el énfasis “en el ayudador, en la satisfacción como ser humano de saber que estás contribuyendo a mejorar el mundo en el que vives”. Y añade que contribuirá a movilizar a la población y a que se multipliquen “las pequeñas acciones”.

TVE también hace guiños a los emprendedores a través de espacios enfocados a fomentar la idea de que en España se puede crear empleo. Uno de estos es Código Emprende, presentado por Juan Ramón Lucas. Otro, Tu oportunidad —no estrenado todavía—, destinado a emprendedores que necesitan financiación para desarrollar su negocio o impulsar su empresa. Basado en el formato de Sony Pictures Dragons Den —nacido en Japón pero exportado con éxito a Reino Unido— da voz a ciudadanos para exponer su idea de negocio ante un panel de inversores que se encargará de valorarlas y decidirá si son viables o si no merecen malgastar ni un euro en ellos.

La cadena presenta Tu oportunidad como “el escaparate perfecto para hacer realidad tu sueño empresarial”. “TVE motiva la cultura emprendedora, además de exponer las vías y mecanismos para acceder a la financiación empresarial y contribuir a la cultura de generación de empleo y autoempleo”, añade la productora Secuoya, responsable del proyecto de La 1. Donde no llega el crédito bancario allí estará también TVE.