El contrato de los 18 millones

El contrato de adquisición de los derechos televisivos de la Supercopa y la Copa del Rey de fútbol ha sido la principal causa del despido fulminante del director de la administración económico-financiera de RTVE, Ignacio Mínguez-Yugueros. Una destitución que se llevó a cabo el pasado 2 de agosto después de que la corporación hubiera abierto un expediente informativo al detectar irregularidades en la gestión de los contratos relacionados con los derechos del fútbol español, según explican fuentes de la dirección del grupo audiovisual.

Entre las anomalías observadas por la televisión publica, la más grave ha sido la cesión del crédito de Santa Mónica Sports —la compañía que comercializa derechos televisivos de competiciones futbolísticas— a una entidad financiera (Bankia). Este crédito se había suscrito para la compra de los partidos de la Supercopa y la Copa del Rey. Aunque la operación se remonta a 2011, el responsable económico no la había notificado. La cesión, además, dificultaba el plan de la cadena pública para intentar negociar a la baja con Santa Mónica Sports el contrato para la retransmisión de esos partidos, cuyo precio era de 18 millones de euros por tres años. El hecho de que este crédito estuviera cedido a una entidad bancaria impedía establecer otras líneas de compensación con la empresa dueña de los derechos.

Esta irregularidad en el área de compras de contenidos podría no ser la única. RTVE mantiene abierto un expediente para esclarecer aspectos relacionados con la adquisición de eventos deportivos. No se descarta que pudieran producirse en las próximas semanas nuevas destituciones en la cúpula directiva.

La cadena investiga anomalías en la compra de derechos deportivos

El supuesto desconocimiento de la cesión del crédito de Santa Mónica Sports es una de las causas que ha llevado a RTVE a calificar de “deficiente” la gestión realizada en la administración del departamento económico y financiero de RTVE. Este ha sido el motivo alegado por la corporación para despedir, sin ningún tipo de indemnización, a Mínguez-Yugueros, cuyas explicaciones sobre el entramado que ha rodeado a este contrato no convencieron a la dirección de la televisión pública, según las mismas fuentes.

Después de la apertura de un expediente sancionador, la empresa decidió la destitución y el despido inmediato del directivo, que estaba vinculado al ente público desde mediados de los años noventa. No formaba parte de la plantilla fija de la casa sino que era uno de los múltiples altos cargos contratados por la corporación. Fuentes de RTVE precisan que se ha tratado de un despido disciplinario y que se ha actuado con la máxima urgencia ante la posibilidad de que estas actuaciones pudieran prescribir.

El elevado precio de los derechos deportivos, y la espiral de crecimiento registrada en los últimos años, ha llevado a TVE a no prorrogar los contratos para la retransmisión de determinados eventos. La cadena pública decidió este año renunciar a la selección española de fútbol (en 2011 pagó 45 millones de euros) y fue Mediaset España la que se ha quedado con las imágenes de los partidos de la fase de clasificación para el Mundial de 2014 y también de los amistosos. En su política de ahorro, TVE se ha desprendido también del campeonato mundial de motociclismo y del torneo de tenis de Roland Garros.