Nace la nueva cadena SER

Los casi cinco millones de oyentes de la cadena SER asistieron ayer a un cambio de gran calado, uno de los más profundos de su historia, con una renovación de voces y sintonías. Algunas chocantes, como la de El larguero, una adaptación a cargo de Estopa del clásico “hincha tú eres el mejor escuchando el transistor”, que ha sorprendido al propio José Ramón de la Morena.

Pepa Bueno, hasta hace dos meses la imagen del Telediario-2 de TVE, se encarga ahora de despertar a los oyentes más madrugadores; Gemma Nierga, después de 15 años en la franja vespertina, anima las mañanas con sus inseparables Juanjo Millás y Javier Cansado, y Carles Francino, siete temporadas saludado a los oyentes a las seis de la mañana les da ahora las buenas tardes.

Pepa Bueno, que dirige junto a Gemma Nierga el matinal Hoy por hoy, reconocía que su debut había sido “una emoción enorme”. Era la chica nueva en la oficina y ayer, durante la presentación de la temporada, agradeció al equipo el trabajo realizado recordando también al fundador del espacio, Iñaki Gabilondo. “Creo en la responsabilidad social del periodismo y estoy contenta de estar en una casa que defiende el periodismo riguroso”, dijo Nierga, al mando del bloque más lúdico, estaba satisfecha del engranaje entre ambas. “No nos conocíamos, pero creo que la combinación va a dar muy buenos resultados”. Nierga se lleva consigo a tres colaboradores que la han acompañado desde el primer día: Juanjo Millás, Boris Izaguirre y Javier Cansado.

Asomado ahora a La ventana, Carles Francino propone una “mirada lateral” a la información, una forma alternativa, reposada e inesperada de aproximarse a la noticia. “No sé vivir sin el contacto directo con actualidad”, admitió. Francino se lleva a la tarde secciones que nutrían Hoy por hoy, como Todo por la radio con Toni Martínez, Javier Coronas y Especialistas Secundarios; la Unidad de Vigilancia Linguística, de Isaías Lafuente, o el concurso literario Relatos en cadena. También se trasladan a la tarde las recetas de Martín Berasategui, o la muy personal crónica futbolística de Michael Robinson. Al equipo de La ventana se incorpora también Roberto Sánchez, que estaba al mando de Si amanece nos vamos, un espacio que desaparece de la parrilla (su hueco lo cubrirá la repetición de El larguero).

Otra novedad es la renovación del magacín del fin de semana A vivir que son dos días, un espacio que quiere ser “como el colorín de los periódicos”, según Javier del Pino, su director y presentador. Tras 15 años de corresponsal en Washington, el periodista quiere contar con Cansado, su compañero de penurias radiofónicas, que pondrá en marcha un consultorio absurdo de salud física y bienestar mental que empezará mal y seguramente irá a peor. El programa ficha a Víctor Morales, un periodista ultraconservador (se define como “genuinamente facha”) que tratará de convencer a la audiencia de que ha entendido mal toda la información política.