Viaje a la realidad entretenida

Primero fueron los realities, luego llegaron los programas de entretenimiento informativo (Callejeros o Mi cámara y yo), más tarde los coaching (Supernnany, Hermano mayor) y ahora las docuseries (Cuerpo médico o Aeropuerto)… En la época dorada de las series de ficción en televisión, la realidad, el factual entertainment (entretenimiento de no ficción), ocupa cada vez más espacio en las parrillas españolas.

El próximo domingo La Sexta estrenará en prime time (22:25, tras Salvados) su nueva apuesta de entretenimiento de no ficción, Cuerpo médico (producido por Eyeworks Cuatro Cabezas). Una docuserie de ocho episodios en la que conoceremos, tal y como define Esperanza Martín, directora de programas de La Sexta, “las dos facetas, tanto la personal como la profesional, de un colectivo apasionante, el médico”, desde un cirujano a una doctora de emergencias.

Y es que esta mezcla de información y entretenimiento, lo personal y lo profesional, es lo que hace atractivo este género basado en la realidad. Si las funciones básicas de la televisión son formar, informar y entretener, en la parilla actual para competir en audiencia no se puede hacer por separado. “La realidad es la materia prima con la que se construye el programa, pero el objetivo ya no es informar al espectador sobre el mundo real sino entretenerlo”, explica Bienvenido León, profesor de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Navarra.

“El nacimiento de Cuatro, y especialmente de Callejeros, supuso un antes y un después en el desarrollo del factual entertainment en España”, apunta Fernando Jerez, country manager de Discovery Max y antiguo director de antena de Cuatro. Luego llegarían otros programas en ésa y otras cadenas hasta el lanzamiento, el pasado 12 de enero de 2012, de Discovery Max, el primer canal dedicado al 100% al entretenimiento de no ficción y que está cosechando un importante éxito: cerró el mes de enero con un 0,9% de audiencia y en febrero media ya un 1,2%. “Hemos tenido una aceptación muy buena, por encima incluso de las mejores expectativas”, reconoce Jerez.

Pero, ¿a qué se debe este gusto por la realidad? “Este género tiene una gran capacidad de sorprender y esto lo aprecia el espectador”, sugiere Jerez. Para Esperanza Martín de La Sexta, “son formatos sencillos de ver y permiten a la gente identificarse con ellos”. Además “permite competir en el prime time con presupuestos bajos y que, además, aportan fidelidad de audiencia y marca”, remata Miquel García Horcajo, jefe del área de nuevos formatos de Televisió de Catalunya.

Discovery es la marca por excelencia del factual en el mundo. Ha sido la cadena que mejor ha combinado la mezcla entre entretenimiento y realidad, “da igual el tema que tratemos, el espectador sabe que en Discovery Max va a encontrar no ficción”, asegura Jerez. Uno de los ejemplos más claros es El último superviviente. Partiendo de una premisa documental, mostrar distintas técnicas de supervivencia, este programa es prácticamente una película de aventuras. Con modos observacionales, pero con estilo de montaje más propio de la ficción, consiguen entretener en cada capítulo con una historia sobre la lucha por la supervivencia de Bear Grylls en medio de la naturaleza.

Precisamente un vídeo viral ya clásico de Internet (“Bear Grylls Kilauea” en Youtube) sobre El último superviviente plantea una de las cuestiones más polémicas en torno a este género, ¿cuánto hay de realidad y cuanto de ficción o guión? “Cada vez tiene más peso el entretenimiento. No importa tanto que lo que se cuente sea verdad como que sea entretenido”, comenta el profesor León. Fernando Jerez, por su parte, defiende el género, quitando casos puntuales, “lo que se muestra es la realidad, aunque de manera distinta a lo que estamos acostumbrados, pero el medio (la televisión) no la distorsiona”.

Otra de las características de este género es la dificultad de establecer límites claros entre los subgéneros. Reality, coaching, infotainment, docureality, docutainment, docuseries…, formatos basados en la realidad que son sucesores del factual y se han generado a partir de la combinación de diversos elementos dando más peso a la realidad, al entretenimiento o, en algunos casos, a la ficción directamente. Para Esperanza Marín la clave en estos formatos reside ahí, porque “la mezcla perfecta entre realidad y entretenimiento nos daría la fórmula del éxito”. De esta manera realities, infotainments como Callejeros o Españoles por el mundo, docuseries como Cuerpo médico o docurealities como Mario y Alaska están ocupando el prime time, tradicionalmente terreno de la ficción, y el resto de las parrillas de las cadenas españolas.

Un nuevo giro lo veremos en Baby boom, próximamente en el prime time de La Sexta, la adaptación española del exitoso One Born Every Minute de la cadena británica Channel 4, toda una experta en el entretenimiento de no ficción. La serie contará la vida en el área de maternidad del Hospital de O’Donnell en Madrid. Una de sus principales novedades es que está grabado con decenas cámaras y micrófonos fijos sin necesidad de equipos de televisión presentes en la acción. Para Miquel García “el resultado se parece más a una ficción por la proliferación de tiros de cámara o a un reality por la sensación de voyeur y de acceso privilegiado que tiene el espectador”. Todo realidad, sí, pero entretenida.