El consentimiento, protagonista del número de ‘TintaLibre’ de noviembre
Los lectores de EL PAÍS podrán encontrar un avance de la publicación, tanto en la edición digital como impresa, este domingo. El número completo estará disponible en los quiscos y para los suscriptores de ‘TintaLibre’ la próxima semana
¿Brota sola la crispación en el discurso político? ¿Es obligatorio exagerar, deformar y trampear con las palabras? ¿La practican todos por puro vicio o solo unos pocos y de forma premeditada? TintaLibre ha preguntado sobre todo esto a José María Maravall y a Íñigo Errejón, que fueron profesor y alumno en la Universidad, a lo largo de una extensa conversación en la que desprenden una sintonía insólita. Como era de prever, no escapa la amnistía a sus reflexiones. El encuentro forma parte del número de noviembre de la revista, que estará disponible en quioscos y para los suscriptores de TintaLibre a partir de la próxima semana. EL PAÍS avanza un extracto de la entrevista este domingo, tanto en su edición digital como impresa.
El sentido de consentir no parece que esté tan claro como todos creíamos, a la vista al menos de las reflexiones que incluye este TintaLibre (bajo el subtítulo irónico de “Instrucciones de uso” y con una dura portada de Paula Bonet) de Clara Serra, de Santiago Alba Rico o de la ensayista francesa Clotilde Leguil. La buena fortuna ha hecho que un puñado de personajes relevantes de la cultura española y latinoamericana hayan aceptado contar en breve su impresión sobre el consentimiento, y lo han hecho desde Lydia Cacho, Leila Guerriero o Isabel Coixet a Luis García Montero, Alberto San Juan o Máximo Pradera, en algún caso sin perder el humor que derrochan de forma excepcional tanto la historia fabulada que cuenta Miguel Sánchez-Romero (también conocido con el sobrenombre de Maikol) como el perfil brillante y lleno de chispa malévola que despliega Martín Caparrós sobre el desaforado populismo de Javier Milei.
Quizá no se ha acordado mucha gente, pero este año se conmemora el cincuentenario de la muerte de un excepcional músico, Pau Casals. La oportunidad de escuchar a un sabio de la música, Luis Gago, en conversación con uno de los grandes intérpretes contemporáneos de las suites de Bach para violonchelo, Jean-Ghien Queyras, llega acompañada de las reflexiones íntimas de Antonio Muñoz Molina como fascinado oyente de Casals (lo delatan varios momentos de su espléndida última novela, No te veré morir) mientras Ramón Andrés explora el secreto de las suites de Bach y ofrecemos también las cartas que explican por qué Arnold Schoenberg no pudo llegar a cumplir el sueño de que Pau Casals estrenase el concierto que le había dedicado: algunas de las cartas son inéditas, y proceden de la edición en marcha de su correspondencia que preparan Anna Mora y Anna Dalmau para la editorial Acantilado.
¿Más cosas? Más cosas: Enzo Traverso descubre que Europa es más de lo que parece, Boris Izaguirre no calla sus impresiones privadas sobre la serie Bosé renacido, en la que él mismo ha participado, como tampoco se calla sus malicias Fernando Aramburu, que ha cedido parte de un libro en marcha de aforismos para TintaLibre. Y sí, el final es irresistible: una Marisol casi desconocida llena la contraportada del número, con un comentario conmovedor de quien la fotografió durante muchos años, César Lucas.
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