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OTRES
Columna
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El racismo y el mito de la ‘minoría modélica’

“A nivel académico sois la mayoría excelentes y muchos os habéis adaptado muy bien”, me dijo una amiga

Chenta Tsai Tseng
Una reproducción del cartel en aquella manifestación de 1969.
Una reproducción del cartel en aquella manifestación de 1969.

Al conectarme con mi identidad racial tuve dudas sobre qué espacio ocupaba la comunidad asiática dentro y fuera, tanto del colectivo racializado como del activismo antirracista. Yo sufrí racismo pero en mis inicios de concienciación sentí que mis experiencias no eran las mismas que muchos de los ataques hacia otras comunidades racializadas. Además, fuera de estos espacios solía escuchar que los asiáticos no sufríamos racismo. Esta misma idea me la volvió a plantear una amiga hace poco. Fue después de que un grupo de jóvenes me gritara a la cara ‘coronavirus’. Una vez cogimos el metro, ella me planteó la duda de si había racismo contra las personas asiáticas. “A nivel académico sois la mayoría excelentes y muchos os habéis adaptado muy bien”, me dijo.

Días después me acordé del cumpleaños de Huey Newton. Habría cumplido 78 años este 17 de febrero. Huey fue cofundador y líder del Partido Panteras Negras, una organización que surgió en 1966 contra el racismo y las desigualdades hacia la comunidad racializada en Oakland California. Huey fue condenado a seis meses de cárcel y 18 meses de libertad condicional en 1967 por una acusación. El 17 de febrero de hace 52 años unos 5.000 manifestantes salieron a las calles para apoyar a Newton. Una de las fotos de esta manifestación es la de Richard Aoki con un cartel en que se lee "Yellow Peril Supports Black Power".

El término Yellow Peril (‘Peligro Amarillo’ en español) surgió en 1882, con la ley de Exclusión de Chinos en Estados Unidos. La expresión retrataba a la comunidad asiática-estadounidense como una amenaza para los ciudadanos blancos del país. Más tarde la comunidad asiático-estadounidense se reapropió de este apodo despectivo y lo usó en su lucha por la conquista de derechos. Richard Aoki, quien aparece en la foto con el cartel antes mencionado, fue uno de los activistas que se movilizó públicamente. Aoki era además miembro legítimo del partido Panteras Negras y representó las alianzas entre las comunidades racializadas.

Un hecho que a día de hoy parece llamativo. Para entender por qué, hay que recordar otro hecho. En 1966, el mismo año en el que surgió Panteras Negras, partido del que Aoki formaba parte, The New York Times se hizo eco del sociólogo William Petersen que acuñó el término Model Minority (‘Minoría modélica’ en español). Esta ‘minoría modélica’ se refiere, de manera racista, a la comunidad asiático-estadounidense como la comunidad racializada ‘ejemplar’, a pesar de habernos llamado peligro amarillo y habernos oprimido con leyes racistas.

Frente a la ‘minoría modélica’ Petersen colocó al resto como ‘minorías problemáticas’, señalando así a las otras comunidades racializadas. Más allá de las intenciones de Petersen, la ‘minoría modélica’ tuvo tres funciones: oprimir a las otras comunidades racializadas; homogeneizar a la comunidad asiática e ignorar las opresiones de la comunidad asiática como son la cuestión de clase, género, capacidad diversa o neurodivergencia. En definitiva, hacernos creer que la excelencia conduce automáticamente a la igualdad, como reflexiona la artista Rina Sawayama. Una afirmación que es falsa.

Es importante tener en cuenta el pasado para no repetirlo. Recordemos nuestra historia para aunar fuerzas entre las comunidades racializadas, en vez de dividirnos. Una vez más, el ‘peligro amarillo’ apoya al poder negro.

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