Colau quiere triplicar la vivienda en el 22@ para ganar hasta 6.000 pisos
La alcaldesa necesitará apoyo político para aumentar el uso residencial del 10% al 30%
La revisión del 22@, la calificación inventada hace casi 19 años para transformar la zona industrial del Poblenou de Barcelona en un mix de actividad económica, vivienda, equipamientos y verde, ya está lista. La alcaldesa Ada Colau presentó ayer el pacto alcanzado con las empresas y los vecinos de la zona: la gran novedad es que se quiere triplicar la vivienda prevista en el plan original (toda pública): pasar del 10% al 30% del techo que se edifique. Pero para materializarlo es necesario el apoyo de la oposición. Y no será fácil.
El 22@ se ha desplegado en los solares que hay por debajo de la Diagonal (de Glòries hacia el mar). Pero la otra mitad, las 80 hectáreas que hay por encima de la Diagonal y a lado y lado de la calle de Pere IV y por encima de Cristóbal de Moura, están en su mayoría por transformar, según el actual gobierno. Es en esta zona, el nortedel 22@, donde se busca aumentar el porcentaje de vivienda pública.
Críticas de los vecinos y la oposición
Las entidades vecinales han firmado un pacto del que aplauden el incremento de vivienda, pero dicen que es un sí “crítico”, porque, no está garantizado que toda la vivienda sea pública y no se veta la construcción de edificios altos de oficinas.
En el Ayuntamiento, la oposición dejó claro al gobierno que no lo tendrá fácil para aprobar las modificaciones del PGM. PDeCAT, ERC y el PSC aseguraron que no conocían el plan y reprocharon a Colau que no tenga una actitud de entendimiento y diálogo.
Pasar del 10% al 30% del techo supondría llegar a entre 5.000 y 6.000 nuevos pisos “preferiblemente de alquiler”, calculó ayer el coordinador de la Comisión 22@, David Martínez. La comisión se ha encargado de fusionar el documento surgido del proceso participativo vecinal y con el de una comisión de expertos, en la que han participado las universidades.
El actual ejecutivo entiende que un 10% de techo de vivienda social, frente a un 90% de actividad económica, no acaba de hacer ciudad. Es preciso aumentar la densidad de vivienda. “Al 22@ le faltaba profundizar en la cohesión social”, afirmó la alcaldesa. “El 70% se mantendrá de actividad económica y el 30% será de vivienda, para hacer barrio y ciudad”, afirmó Martínez, que precisó que del total de vivienda, el 10% la hará el Ayuntamiento fruto del aprovechamiento que obtenga de cada operación, y el 20% los propietarios privados. El cambio supondría modificar el Plan General Metropolitano (PGM).
El pacto también prevé “desafectar”, que dejen de formar del planeamiento del 22@, una quincena de manzanas de estructura urbana antigua (con calles muy estrechas y muchos pequeños propietarios) entre las que están los barrios de la Plata, Bogatell y Trullàs. Con esta trama y propiedad, asegura el gobierno, no se puede desarrollar el planeamiento original del 22@. En materia económica, el pacto contempla que el 22@ siga siendo un distrito innovador, pero da entrada a la economía social y solidaria. También sitúa en el centro del futuro planeamiento el eje Pere IV, donde están dos complejos industriales como La Escocesa o Can Ricart. Cristóbal de Moura, una calle de ancho doble, será un eje verde.
Un plan “inviable”
El ex arquitecto en jefe del Ayuntamiento, Oriol Clos, muy vinculado al proyecto original, cuestionó ayer el pacto, que tachó de “triunfalista” y aseguró que es “inviable”: porque en la zona norte ya hay planeamiento ya aprobado, aunque los solares estén vacíos. Clos —uno de los 80 firmantes de un manifiesto que el verano pasado pedía mantener el espíritu original del plan y que el texto del pacto ni menciona—, defendió el liderazgo público del proyecto y reclamó una oficina técnica que “impulse, promueva y active” la transformación y alertó de que “en el 22@ la vivienda no es motor, lo es la actividad económica".
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