Los camiones dejan de circular por la N-340 y la N-240

Luz verde para sacar a los camiones de las carreteras N-340, en Tarragona, y de la N-240, en Lleida. El consejo de ministros aprobará este viernes el decreto ley que veta el tráfico de vehículos pesados por ambas carreteras, auténticos puntos negros de la red viaria catalana, y establecerá su obligada circulación por las autopistas AP-7 y AP-2. La medida, largamente esperada, se había encallado durante meses en la tramitación administrativa; en concreto, a la hora de fijar la bonificación a la que van a tener derecho los camiones cuando lleguen al peaje de la autopista.

El Ministerio de Fomento ya ha instalado la señalización que avisa del desvío obligatorio por la autopista de los camiones de cuatro ejes o superiores, pese que hasta que el decreto no sea publicado en el BOE, los carteles permanecerán parcialmente tapados. Fuentes de Fomento ponen de relieve que la plena entrada en vigor de la restricción circulatoria no se demorará más allá del fin de semana. Fomento alega que la medida busca mejorar “la funcionalidad y seguridad” del corredor viario vertebrado por la N-340 y la AP-7, entre Peñíscola y l’Hospitalet de l'Infant, así como el tramo comprendido entre Altafulla y Vilafranca del Penedès. En lo que respecta a la N-240, el enlace vetado a los camiones va de Les Borges Blanques a Montblanc.

La acción copia el remedio que se aplicó, en 2013, en la carretera N-II a su paso por Girona. Sacar a los camiones de gran tonelaje de la N-II y obligarlos a circular por la autopista ha reducido la mortalidad un 60%. Fomento apunta que copiar el modelo en la N-340 y en la N-240, supondrá “una importante mejora de la seguridad vial”.

Hasta que no caduquen las concesiones que tiene el Grupo Abertis sobre ambas vías de peaje —31 de diciembre de 2019 la AP-7 y 31 de agosto de 2021 la AP-2—, a los camiones se les aplicará un sistema de descuentos que fluctuará entre el 42% y el 50% de la tarifa estándar, en función del kilometraje de los trayectos. De hecho, no solo los camiones se benefician de la rebaja de tarifas, ya que también se prevé una bonificación total del peaje a los turismos que hagan el trayecto de ida y vuelta en un solo día, dentro del tramo comprendido entre Alcanar y Vilafranca. Será menester que los conductores dispongan de un sistema de telepago (VíaT) para beneficiarse del descuento.

El gobierno asume el coste de la compensación a la concesionaria por la rebaja del peaje y ha calculado que la medida le supondrá un gasto máximo de 41 millones de euros hasta el año 2021.

El RACC había reclamado insistentemente el desvío de camiones, sobretodo de la N-340, para atajar la alta siniestralidad que registra la carretera. También los ayuntamientos eran muy enérgicos en sus protestas por la falta de soluciones a los frecuentes accidentes. El alcalde de Altafulla, Fèlix Alonso, que además es diputado de En Comú Podem, ha sido el más tempranero en expresar públicamente su satisfacción al conocerse la próxima entrada en vigor de la medida. Por su parte, las federaciones de transportistas se han mostrado abiertamente hostiles al plan, negando que el tráfico de vehículos pesados incremente el riesgo de siniestralidad viaria. Además, reclaman que, de obligar a los camiones circular por la autopista, lo que procede es una exención total, y no parcial, del peaje.