La oposición critica la ubicación de la playa urbana en la plaza de Colón

La playa artificial que una empresa quiere levantar este verano en la plaza de Colón no tiene el respaldo de la oposición. El PSOE, PP y Ciudadanos cuestionan el proyecto y coinciden en que la plaza no es idónea para instalar piscinas y chiringuitos. Argumentan que en otras urbes estas iniciativas se ubican al lado de ríos. La alcaldesa, Manuela Carmena, recordó este martes que Colón acoge en invierno una pista de hielo. La propuesta también despierta el recelo de Ganemos.

Las ediles de Ganemos Rommy Arce y Montserrat Galcerán se ausentaron del pleno en el punto en el que se daba cuenta de la avocación de competencias para conceder la licencia sobre la playa del distrito de Salamanca, dirigido por el edil Pablo Carmona, de Ganemos, al Área de Cultura y Deporte, liderada por la alcaldesa. Las dos concejales argumentaron que la votación se produjo cuando estaban tomando un café, según Europa Press, aunque fuentes municipales insisten en que Ganemos, partido anticapitalista que forma parte de Ahora Madrid, sigue dudando sobre una actuación que prevé la cesión de suelo público a la empresa The Ant Company. Carmona este martes no acudió al pleno, oficialmente por una cita médica.

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El boceto del proyecto —todavía parcial— plantea un espacio con una piscina de olas, chiringuitos, zonas de descanso y más actividades de ocio, cuya apertura se prevé en julio. La entrada tendrá un coste de entre cinco y nueve euros, según adelantaron a EL PAÍS los promotores. Y los usuarios no podrán introducir comida en el recinto. Las actividades en el interior serán gratuitas y la alcaldesa de Madrid calificó la iniciativa de "interesante". Este martes añadió que tanto el Área de Cultura como el distrito de Salamanca tramitarán el proyecto, conocido como MadBeach, "con observancia de todos los requisitos".

No obstante, durante el debate, Silvia Saavedra, edil de Ciudadanos, sostuvo que la cesión de las competencias a Cultura responde a la voluntad de Carmena de evitar que la minoría anticapitalista entorpezca su plan. "Se la queda la alcaldesa porque no quiere jugarse la playa", dijo, y cuestionó la ubicación propuesta. "En ciudades como Ámsterdam, Londres o París las playas artificiales se encuentran en las afueras de la ciudad o en la orilla del río Sena", afirmó.

Las críticas llegaron también del PSOE, socio de investidura de Carmena. La concejal Mar Espinar cuestionó el precio previsto por la promotora para los usuarios. En Sevilla, recordó Espinar, donde gobierna el PSOE, la playa urbana aprovecha el entorno natural del Guadalquivir y el acceso al recinto es gratuito. "En Sevilla los ciudadanos no tienen que pasar por caja", remarcó, y preguntó, sin obtener respuesta, por qué el Consistorio evitó convocar un concurso público para licitar el proyecto.

Carmena sí respondió a las dudas sobre la ubicación de la playa. Insistió en el valor "simbólico" del lugar, que en invierno acoge una pista de hielo, y agregó que se trata de un espacio poco arbolado. Aun así, se abrió a llevar esta experiencia a otros distritos de la periferia en ediciones futuras.

Por su parte, Percival Manglano, del PP, reprochó a la alcaldesa su proyecto de playa en un lugar "simbólico" de la capital: un espacio definido por la bandera de España y el monumento al descubrimiento de América. "Es como si en París ponen la playa en el Arco del Triunfo", argumentó. El edil también criticó la adjudicación "a dedo" de la iniciativa y sostuvo que ya se están produciendo "protestas vecinales".

El edil hizo referencia a las alegaciones presentadas por vecinos del barrio de Salamanca, que temen que la actividad genere ruido (por ejemplo, por los conciertos de música) y que el entorno de la plaza pueda quedar dañado.