Un concejal de El Molar, condenado por coacciones a los responsables de una concesión municipal
Óscar López Canencia, del PP, es el mismo edil que aseguró en 2015 que en España “no hay cunetas suficientes”
El portavoz del PP en El Molar, Óscar López Canencia, ha sido condenado por un delito de coacciones y otro de amenazas a los responsables de una concesión municipal. La Audiencia Provincial de Madrid ha desestimado el recurso que presentó este concejal, el mismo que en abril de 2015 aseguró que en España “no hay cunetas suficientes”. López Canencia está acusado de exigir diferentes contribuciones económicas a los administradores de Tepla Esport, la empresa a la que el Ayuntamiento adjudicó en 2008 la gestión de las instalaciones deportivas.
La Sección 17ª de la Audiencia Provincial, en una resolución fechada el 24 de abril, desestima el recurso de apelación interpuesto por López Canencia y confirma la sentencia dictada en septiembre de 2016. Dicha resolución obligaba al edil a pagar diez euros diarios durante 18 meses en concepto de multa. La cifra, a la que hay que sumar las costas judiciales, supera los 6.000 euros. El juez considera como hechos probados que el acusado coaccionó a los responsables de Tepla tras las elecciones de 2011, cuando fue nombrado concejal de Urbanismo, Personal y Comercio de El Molar, un municipio de 8.300 habitantes al norte de la región.
López Canencia se dirigió a Javier Valero, uno de los dos hermanos encargados de gestionar Tepla, para exigirle “la sumisión a las exigencias de la nueva corporación”. Entre esas peticiones se encontraba, según el auto, una subvención de 1.500 euros para la equipación del club de fútbol local, cuyo presidente era marido de otra concejal. El ahora portavoz del PP en El Molar también pretendía que Tepla contribuyera a la revista editada por el Ayuntamiento mediante la inserción de anuncios publicitarios por una cuantía no determinada y que colaborara con gastos municipales como la cabalgata de los Reyes Magos.
Sanciones a Tepla
El acusado también solicitó a Tepla que despidiera a una limpiadora y que readmitiera a otra, que era madre de una candidata de las listas del PP. La empresa tan solo accedió a patrocinar al equipo de fútbol local, el Molareño, pero se negó al resto de exigencias. Como respuesta, el Ayuntamiento dictó tres decretos en 2012 que imponían a Tepla sanciones por 13.000 euros, pero que la sentencia no corrige al considerarlas correctas. “Impusimos las sanciones por el mal funcionamiento del servicio y fueron avaladas por la Comunidad de Madrid”, explica López Canencia. Valero sostiene que la finalidad era presionarles.
“Acato la sentencia con disconformidad, porque no tenía capacidad de sancionar. Solo hice algunas recomendaciones. Siempre he dicho que Tepla debía tener un detalle con el pueblo y hacer alguna aportación en concepto de responsabilidad social”, se defiende López Canencia, que ya fue multado en 2015 por un delito continuado de coacciones a otro concejal de su formación. El auto sostiene que el ahora portavoz del PP también solicitó entrevistarse con Ramón Valero, el otro responsable de la empresa, al que amenazó con “calzarle una hostia” durante la comisión de seguimiento de la concesión celebrada el 1 de marzo de 2012. En noviembre de ese año, el Ayuntamiento retiró unilateralmente la concesión a Tepla, que se alargaba hasta 2023. El caso está recurrido ante un juzgado de lo contencioso administrativo.
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