Collboni critica el pacto de Colau para la L10

El PSC ha exigido este lunes a la Generalitat y al gobierno central que “asuman su responsabilidad” e inviertan para abrir las estaciones de la Línea 10 y la Línea 9 de Metro, que permanecen cerradas en l’Hospitalet de Llobregat.

El pasado 27 de diciembre, la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, y el vicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, firmaron un contrato mediante el cual el Consistorio barcelonés compraba un paquete de inmuebles en desuso a la Generalitat valorados en 40 millones de euros. A cambio, el gobierno autonómico se comprometía a poner en funcionamiento la línea 10 Sur del Metro y a abrir las estaciones de Foneria y Foc Cisell.

Aquel mismo día el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, anunciaba que abrir las estaciones de Ildefons Cerdà (junto a la Ciudad de la Justicia) y Provença costaría 39 millones de euros. Una inversión que desconocía de donde podría obtener.

El segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, la alcaldesa de l’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín y la alcaldesa de Santa Coloma de Gramenet, Núria Parlon, junto con el alcalde de Sant Joan d’Espí y vicepresidente de Transporte y Mobilidad del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Antonio Poveda, han comparecido esta mañana, después de la ejecutiva del PSC, con un mensaje común.

El máximo cargo socialista en la ciudad de Barcelona, Jaume Collboni, ha sido el que ha lanzado la crítica: “No todos los ayuntamientos pueden asumir el precio de pagar las estaciones de Metro de su territorio. La Generalitat y el Estado deben hacer una previsión y acabar la Línea 9 y 10 donde ya se ha invertido el 80% del coste de la infraestructura”. El segundo teniente de alcalde ha criticado que la Generalitat se financie gracias a los adelantos financieros de los ayuntamientos. “De esta forma, sólo tendrán metro aquellos consistorios que se lo puedan permitir”, ha denunciado.

La alcaldesa de l’Hospitalet de Llobregat ha informado que las futuras estaciones de Provença e Ildefons Cerdà “afectarán a 60.000 vecinos. Nuestro Ayuntamiento no tiene la capacidad de financiar la infraestructura y más después de haber tenido que financiar, por ejemplo, las plazas de guardería”. Marín ha confesado que “solo el Ayuntamiento de Barcelona tiene la capacidad de realizar una inversión de esta envergadura.

Parlon ha pedido una planificación global de la infraestructura, mientras que Poveda ha anunciado que ha enviado al Ministerio de Fomento una misiva solicitando una reunión para resolver la financiación de las líneas 9 y 10. El responsable de AMB también ha cargado contra la Generalitat: “ampliar las líneas de Ferrocarriles de la Generalitat es muy importante pero la Línea 9 es mucho más porque tenemos líneas de metro sobrecargadas como la línea 5”.