Eclecticismo latino y pop rock de aquí

De ese exuberante combo portorriqueño que responde al nombre de Calle 13 no solo salen canciones demoledoras que juntan ritmos tropicales, letras concienciadas y ecos de hip hop y rap. También salen cantantes de la talla de Ileana Cabra, artísticamente conocida como iLe. Inquieta su versión de La Pared, una canción que en España popularizó Bambino en los sesenta y hace menos años Amparanoia. A sus 27 años, iLe se aparece como una cantante con un esperanzador camino por delante para convertirse en toda una estrella de la música latina contemporánea. Su primer disco en solitario se llama iLevitablemente y el viernes lo defiende en Madrid.

Los catalanes Manel son otra revelación del indie español de la última década, aunque la etiqueta se les quede pequeña. Decantados últimamente hacía la electrónica, según su cuarto y reciente disco, Jo competeixo, siguen cantando en catalán, pero eso no les impide éxito en el resto de España. Son de los grupos más apreciados en los festivales de verano y hoy abarrotan la Joy.

El rock duro español le debe todo a bandas como Obús, Barón Rojo, Pánzer o Niágara. De estas tres últimos salieron en 2007 los músicos que formaron Atlas, la banda rockera que hoy presenta su nuevo disco Nuevos tiempos, viejas costumbres, cargado de ese rock de siempre que no pasa de moda.

Parece que la bajista estadounidense Nik West le ha cogido gusto a España y no se ha vuelto a su país desde agosto. Con esa contundencia funky y rockera, y esa imagen apabullante, esta noche y la de mañana regresa al Clamores, aunque mañana antes habrá actuado allí The Sugar Stones, una de las mejores bandas madrileñas de tributo a los Rolling Stones. La noche de hoy se puede completar con el rock gótico de una de las formaciones más veteranas del género, The Mission, en activo desde hace 30 años.

Desparecido Juan Gabriel, la música popular mexicana tiene en Ana Gabriel otro baluarte muy importante. Conocida como La diva de América, lo mismo canta rancheras, boleros que baladones románticos y desgarradores. Es posible que mañana La Cubierta de Leganés se quede pequeña pues la colonia latina asentada en la comunidad madrileña tiene en ella un verdadero mito.

Las dos actuaciones de mañana en el renovado Café Berlín tiene el nexo común del flamenco. En la sesión de las nueve la cantante más que cantaora, Chocolata, y en la de las once, el Potito, un cantaor que le viene el nombre porque empezó desde muy chico y ya ronda los cuarenta.

Los suecos Katatonia descargarán mañana todo ese rock metalero que les ha convertido en poco más de dos décadas en un grupo de culto. Más de diez discos de estudio a sus espaldas desembocan en el reciente The fall of hearts que traen ahora a España. Con algún matiz más, y arrimado al bolero, la rumba y el tango, se coloca el rock de Gato Charro, el grupo liderado por Álvaro Pacheco que mañana estrena su tercer disco, En un balancín. El domingo a mediodía hay un concierto pensado para los niños a cargo de los catalanes The Pinker Tones, antes artistas electrónicos, y ahora recreadores de universos infantiles sin ñoñerías ni cursiladas.