Parar la corrupción, “línea roja” de EUPV para cualquier pacto

El programa electoral de Esquerra Unida del País Valencià (EUPV), debatido con sectores sociales, plataformas cívicas y organizaciones sindicales, tiene una zona cero, la de la regeneración democrática. Y una “línea roja”, sobre la que el candidato a la presidencia de la Generalitat, Ignacio Blanco, advirtió este lunes: “No vamos a hacer ninguna renuncia”.

La propuesta de regeneración democrática de la coalición de izquierdas incluye una “comisión de la verdad”, que haga públicas las irregularidades cometidas, determine responsabilidades políticas, colabore con la justicia y solicite un estudio riguroso sobre el impacto de la corrupción en la economía valenciana; la eliminación del aforamiento a los diputados; la limitación de mandatos; la retirada de privilegios a los expresidentes; el cambio de la normativa electoral, con la eliminación de la barrera del 5%; la recuperación de la memoria democrática, que incluye una comisión de investigación sobre el robo de recién nacidos, y la eliminación de la financiación pública a las instituciones religiosas.

Como “propuestas para un futuro gobierno” y para “el encuentro de las fuerzas progresistas después del 24 de mayo” presentó Marga Sanz, coordinadora de EUPV, las líneas maestras del programa. La diputada Esther López Barceló, cabeza de lista por Alicante, las situó como el resultado de “un laborioso proceso de abajo arriba”. E Ignacio Blanco contrapuso el hecho de que el PP todavía hoy promueva “un programa oculto”, al volver a plantear temas como el AVE a las tres capitales valencianas o un nuevo Plan Hidrológico Nacional, a otra actitud. “Nuestro compromiso es no mentirle a la gente”, dijo. “Practicaremos la transparencia que reclamamos”.

Además de democracia, el programa de EUPV incluirá apartados sobre economía y trabajo, territorio y medio ambiente, servicios públicos, igualdad y cultura y comunicación. “Se puede aplicar perfectamente”, comentó Blanco de su lista de propuestas de regeneración democrática, que prevé como primera medida reunirse con la asociación de víctimas del metro y reabrir la comisión de investigación parlamentaria sobre el accidente: “No tiene dificultades de tipo presupuestario”.

Blanco definió el periodo de gobierno del PP como una “cleptocracia” e insistió en que es “básico” desalojar a los corruptos en las elecciones del 24 de mayo próximo. El candidato a presidente de la Generalitat aseguró que el suyo “ha sido el grupo que más ha trabajado contra la corrupción” y enumeró casos como el de los contratos de Rafael Blasco en Sanidad, Brugal, la Fórmula 1, las residencias de la familia Cotino, las negativas del Consell a ofrecer información a los diputados (por las que ha sido condenado reiteradamente) y el escándalo que involucra al presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus.

“Dialogar” para alcanzar propuestas de consenso es un objetivo que Blanco asumió como algo inesquivable para conseguir el cambio. “Hará falta un pacto”, indicó, para precisar que puede concretarse en un acuerdo de legislatura o de gobierno. Pero añadió que EUPV “no hará renuncia alguna” en lo que considera cuestiones fundamentales. Con todo, insistió en que “el desalojo del PP de la Generalitat es una emergencia social” y una cuestión de “higiene democrática”.