Antonio Sanz promete “diálogo” como delegado del Gobierno
Sáenz de Santamaría dice que es un dirigente de “grandes consensos”
Antonio Sanz es desde este lunes nuevo delegado del Gobierno en Andalucía, un puesto que habría deseado ocupar con anterioridad pero que asume apenas 10 meses antes de las próximas elecciones nacionales. El político gaditano, que hasta la semana pasada se encargaba de coordinar la precipitada campaña electoral del PP en Andalucía, ha sido respaldado en el acto de la toma de posesión por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.
La política popular le ha trasladado el apoyo del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y le ha definido como una persona “trabajadora, incansable y seria, capaz de ganar grandes batallas y alcanzar grandes consensos”, ha dicho durante el evento celebrado en Sevilla, al que también ha asistido el candidato popular a la presidencia de la Junta, Juan Manuel Moreno, y la anterior delegada del Gobierno andaluz, Carmen Crespo, que cesó en el cargo hace dos semanas para presentarse a las elecciones andaluzas como cabeza de la candidatura del PP por Almería.
Sanz se comprometió al “diálogo leal y sincero” y la “cooperación permanente” con las Administraciones. “Las sociedades con más futuro son aquellas que tienen capacidad para alcanzar consensos y puntos de encuentro que no menoscaben el pluralismo”, ha planteado Sanz.
Y colaboración es lo que ha reclamado la presidenta de la Junta, Susana Díaz. “Espero que sea una etapa donde haya más colaboración y sea el delegado del Gobierno en Andalucía y no pase como en etapas pasadas, donde en algunos momentos he encontrado a alguien que representaba los intereses partidarios, más que de Andalucía”, ha considerado Díaz, que ha vuelto a quejarse de los intereses que Andalucía ha pagado al Gobierno por el fondo de liquidez autonómica. Este lunes, en un nuevo asalto de esta polémica, Sáenz de Santamaría ha pedido a Díaz “algo más de rigor” para explicar a los andaluces “cuánto dinero se van a ahorrar en intereses con la nueva facilidad financiera que va a dar el Gobierno”.
Susana Díaz ha respondido de inmediato a la demanda lanzada por la vicepresidenta. “Que no mienta y diga la verdad: a partir de ahora es cuando no van a cobrar por la denuncia que, entre otros, ha hecho la Junta”, ha replicado Díaz, que ha recordado que el Ejecutivo andaluz ha abonado hasta ahora 980 millones de euros por estos intereses al Gobierno central.
Esta lucha de acusaciones es la herencia de un enfrentamiento comenzado el pasado sábado entre Díaz y Sáenz en el que la vicepresidenta criticó la gestión de la líder andaluza. El domingo siguió Díaz con el choque de declaraciones y recriminó al Gobierno que se haya portado con Andalucía como “un banco”.
Por su lado, el número dos del PSOE andaluz, Juan Cornejo, ha calificado el nombramiento de Sanz como delegado del Gobierno en Andalucía como “una huida” ante la “guerra interna” que se desatará en el PP andaluz por unos resultados que, en su opinión, no serán buenos. Cornejo ha dudado de que Sanz reúna el perfil institucional para este cargo. “Él es el responsable de garantizar la seguridad. A mí me da miedo”, ha asegurado Cornejo, quien ha aclarado que es “una expresión coloquial”.
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