Un dirigente vecinal de Vigo, ante el juez por una permuta urbanística

El presidente de la comunidad de montes de Cabral, Luis Rodríguez, ha apelado hoy a un acta presuntamente falsificada, que también investiga el juez, para justificar una permuta urbanística por la que está imputado por supuesta apropiación indebida. Rodríguez compareció durante más de dos horas en el Juzgado de Instrucción número 8 de Vigo, que investiga una operación inmobiliaria que causó un quebranto a la entidad de en torno al millón de euros, según cálculos de los opositores a la junta directiva.

La revelación de esta operación urbanística desencadenó la desconfianza de los comuneros en la junta y fue el detonante de su rechazo al macrocentro comercial de Portocabral, que pretendía convertirse en el mayor de Galicia, y que provocó un largo conflicto en la parroquia viguesa. Los opositores de Luis Rodríguez trasladaron toda la documentación de la permuta a la fiscalía, que instó al juzgado a abrir una causa contra Luis Rodríguez por apropiación indebida y por presuntas irregularidades en las cuentas de la entidad.

Los hechos que se investigan consisten en una permuta negociada personalmente por Rodríguez con el titular de una inmobiliaria, a la que la comunidad de montes aportó 3.140 metros cuadrados de terreno industrial a cambio de 4.300 de terreno rústico clasificado como comunal. La comunidad desembolsó previamente 240.000 euros para completar la parcela que interesaba a la inmobiliaria. Según cálculos de la oposición, el valor los terrenos aportados por la comunidad superaba el millón de euros, frente a los apenas 100.000 en los que se calcula el de los recibidos a cambio.

En su declaración ante el juez, Rodríguez ha asegurado que la operación se hizo “siempre con arreglo a lo que aprueba la asamblea”. Para avalarlo, ha apelado a una reunión de los comuneros en la que supuestamente estos aprobaron la operación por “unanimidad”. El acta que refleja esa supuesta aprobación está siendo investigada en otro juzgado por supuesta falsificación, ya que los titulares del monte de Cabral sostienen que en ningún momento se informó de “operación inmobiliaria alguna”.

Tras declarar ante el juez, Rodríguez ha afirmado que no se apropió “absolutamente de nada indebidamente” y que la actuación se hizo “siempre con arreglo a lo que aprueba la asamblea”. El presidente, que ha sido recibido en los juzgados por decenas de personas que pedían la dimisión de la junta directiva, ha considerado la denuncia un acto de “puñetera envidia”.

El juez también ha tomado declaración a dos funcionarios de la Xunta, autores de sendos informes previos que se oponían a la permuta y que fueron obviados por la directiva de Cabral. También ha comparecido en calidad de imputado el secretario de la comunidad, Manuel Costas.

Otro juzgado de Vigo, el número 7 de instrucción, ha sobreseído mientras la denuncia presentada por Luis Rodríguez contra 17 comuneros por una presunta falta por coacciones, por los incidentes registrados en una junta celebrada en diciembre de 2013. Los altercados se desencadenaron después de que el presidente de la comunidad concediese solo un minuto a sus opositores para presentar un informe sobre las cuentas de la entidad.