La policía autonómica expulsa a tres agentes por su actividad sindical

La expulsión por supuestas faltas disciplinarias graves de tres agentes de la policía autonómica, la unidad adscrita a la Xunta del Cuerpo Nacional de Policía, llevó ayer a los tres principales sindicatos policiales a comparecer conjuntamente y relatar el “acoso laboral” al que, dicen, están sometidos los agentes destinados en A Coruña. Lo atribuyen, en el caso de los expulsados, a su actividad sindical y en uno de los expedientes que mostraron se censura de un agente que “al parecer, realizó una serie de declaraciones a diversos medios de comunicación como representante sindical”.

 Los portavoces de los sindicatos SUP, CEP y UFP que comparecieron en Santiago, arropados por las centrales sindicales y las asociaciones de la Guardia Civil, cuantificaron el acoso que dicen sufrir los 50 agentes que trabajan en A Coruña. En los dos últimos años se les han abierto 23 expedientes disciplinarios frente a los 17 incoados en los 18 años anteriores. De los expulsados, destacaron los sindicatos, se argumentó su “inadaptación al trabajo” pese a que son policías desde hace más de dos décadas. De hecho, su expulsión de la unidad autonómica conllevará su reingreso, con menos salario, en una unidad policial ordinaria.

De ese supuesto acoso laboral, que varios de los agentes ya han denunciado en los juzgados, son responsables, apuntan los sindicatos, Antonio Nieto, inspector jefe provincial de libre designación, y Javier Teijido, otro inspector que, dicen, ocupa su actual plaza de forma “irregular” en comisión de servicios. Por ello piden que sean apartados de sus puestos por los Gobiernos gallego y central. La Delegación del Gobierno guardó ayer silencio pese a que el actual delegado, Santiago Villanueva, fue hasta noviembre director general de Interior en la Xunta, departamento que dice que se limitó a tramitar la petición de baja de los agentes que trasladaron los mandos por su falta de “idoneidad” para el puesto y “no porque sean sindicalistas”.

Los sindicatos también piden a ambos Ejecutivos que elijan bien al sustituto del comisario jefe de la policía autonómica, José Antonio Álvarez Villar, que se jubilará en cuestión de semanas y al que apuntan como responsable por omisión del acoso que dicen sufrir. De Álvarez Villar los sindicatos recordaron que fue condenado en 1977 “por maltratar a detenidos por su ideología política”.

Ante la discrecionalidad que los sindicatos atribuyen a sus superiores, se les preguntó si la ciudadanía puede estar segura de no sufrir atropellos de la policía autonómica. Los sindicalistas aseguraron que “el funcionario cumple su labor” y ofrece un “trato exquisito” a los ciudadanos y que son los mandos los que “campan a sus anchas” y “presionan” a los agentes para aumentar en algunos casos la “intensidad con que se hacen ciertos servicios”.