Garzón, la esperanza roja
En tres años, pasará de militar en la calle a ser aspirante a la presidencia del Gobierno
En tres años, pasará de militar en la calle a ser aspirante a la presidencia del Gobierno. Su objetivo: “Expulsar a los mercaderes de La Moncloa”.
Son las palabras de este joven de 29 años, nacido en Logroño, pero criado y formado en Málaga. Hijo de un profesor de instituto, estudió Económicas en la capital de la Costa del Sol y el máster en la Complutense de Madrid. Regresó a Andalucía para ser investigador en la sevillana universidad Pablo de Olavide. Ese es su currículo académico. El político es también abultado. A los 17 años se afilió al Partido Comunista. En la universidad fue un destacado activista. Con el 15-M conoció el poder de la calle, que para él sigue siendo fuente de toda inspiración. En 2011, la dirección regional de IU lo ficha como su cabeza de cartel en las elecciones generales y sale elegido diputado por Málaga. El diputado más joven del Congreso, 26 años, pero no el más inexperto.
Se llama Alberto Garzón Espinosa. El joven que con toda probabilidad ganará las elecciones primarias de IU el 8 de febrero próximo. Tendrá la responsabilidad de obtener un buen resultado en las elecciones generales y frenar el “tsunami electoral”, en sus propias palabras, que representa Podemos.
El objetivo del diputado malagueño es expulsar a “los mercaderes de La Moncloa”
En la espectacular carrera del joven diputado malagueño han tenido mucho que ver los líderes andaluces de IU, en donde vive el 40% de la militancia. Además, claro está, de su valía personal. Desde hace meses, esos líderes vienen trabajando para preparar y apoyar a Garzón como heredero de Cayo Lara.
El modelo de relevo, lo tenían cerca: el desarrollado en Andalucía cuando un casi desconocido profesor de instituto, Antonio Maíllo, sustituía hace año y medio al veterano Diego Valderas, hoy vicepresidente de la Junta. Maíllo, Valderas y José Luis Centella, secretario general del PCE, han sido los principales valedores de Garzón.
Los tres lo han elogiado públicamente. “Vale para todo”, afirma Maíllo, quien añade que “Garzón es un extraordinario candidato capaz de recuperar la esperanza en la política”.
¿Qué aporta Garzón al panorama político? Frescura y radicalidad. Una excelente preparación académica —pese a su juventud— y una gran capacidad de comunicación. Sus libros, artículos y apariciones en televisión lo demuestran.
Políticamente, defiende “una izquierda ideologizada y organizada”, frente a su principal adversario, Podemos, que se mueve en una “calculada ambigüedad ideológica”, afirma. Pero, al tiempo, propone un proceso de convergencia con todas las fuerzas de izquierda, incluida Podemos, para cumplir el objetivo de expulsar a los mercaderes de La Moncloa.
Garzón es la esperanza roja de la izquierda, ahora renovada, para que IU no quede sepultada bajo el tsunami Podemos. Una misión casi imposible.
@JRomanOrozco
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