El juez ordena desalojar a los okupas de extrema derecha instalados en Tetuán

Las tensiones entre okupas de extrema derecha y de extrema izquierda vividas en el distrito de Tetuán en las últimas semanas terminarán en desalojo, tal y como estaba previsto. La Delegación de Gobierno anunciaba ayer que el juez del Juzgado de Instrucción número 48 de Madrid, tras estudiar el informe presentado hace una semana por la policía, había dictado la orden de desalojo “urgente” del edificio de la calle Juan de Olías ocupado hace un mes por personas de ideología fascista.

“El informe detalla, en concreto, diez incidentes entre ambos grupos extremistas, entre los que destaca el lanzamiento de cócteles molotov y agresiones, habiéndose llevado a cabo por parte de la Policía Nacional la incautación de armas blancas, defensas extensibles, palos y otros objetos contundentes”, recoge la nota enviada desde la delegación.

Desde la llegada al barrio —el pasado 15 de agosto— de una cuarentena de jóvenes simpatizantes del partido de ideología neonazi MSR (Movimiento Social Republicano) los incidentes se han sucedido acompañados de “agresiones racistas” denunciadas por parte de los del bando izquierdo —que han resultado ser falsas, tal y como reconocieron posteriormente las propias víctimas— y también de supuestos “ataques” denunciados por parte del bando derecho. Y el ambiente ha terminado por caldearse demasiado: “Lo que no ha llegado a pasar, podría pasar ahora, tal y como están los ánimos”, reconocía un vecino del barrio.

El informe presentado por la policía al juez detallaba hasta diez incidentes

El miedo y los resquemores se han ido apoderado del vecindario, convirtiendo en “un polvorín” —en palabras de la delegada Cristina Cifuentes— un distrito madrileño muy popular de 155.000 con un 17% de inmigración.

A última hora de ayer los okupas de extrema derecha negaban haber recibido una orden de desalojo y tenían previsto repartir bocadillos hoy a las 17.00 horas en su emplazamiento, denominado Hogar Social Ramiro Ledesma en honor al histórico falangista y desde el que aseguran querer “ayudar solo a españoles”. Está previsto que la orden del juez se ejecute en los próximos días.

Por su parte, el edificio conocido como centro social La Enredadera es el emblema de los colectivos sociales de izquierda en el barrio y funciona desde 2009. El lunes reivindicaba su espacio y su actividad social en el distrito ante la amenaza de desalojo inminente transmitida desde la propia Delegación: “La Policía Nacional se dirigió esta semana a la propiedad, a los efectos de que interpusiera la preceptiva denuncia, imprescindible para que el Juzgado dicte orden de desalojo, pero en este caso, la propiedad ha manifestado que desiste de la denuncia, dado que mantiene una relación contractual con los ocupantes del inmueble”, reconocía ayer esa administración.

Miembros de la Asociación de vecinos de Tetuán se reunieron ayer por la tarde con la subdelegada del gobierno, Mar Angulo, para terminar de aclarar la situación y calamar los ánimos. Todo indica que el barrio volverá a su estado original y esta tensa página pasará a formar parte de su historia.