El PSM blinda a Tomás Gómez con unas primarias a su gusto

El Comité Regional del PSM ha evidenciado la recuperación del control de los socialistas madrileños por parte de Tomás Gómez después de su mayor momento de debilidad desde que fue nombrado secretario general en 2007. Las críticas que provocó el desplome electoral en las europeas de hace cuatro meses y la falta de autoridad entre los tomasistas cuando se les instó a apoyar a Pedro Sánchez tras la renuncia de Susana Díaz en detrimento de Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias en las primarias del PSOE han dado paso a un periodo de calma en el que Gómez se ha apuntalado.

El proceso de primarias del PSM será como ya deslizó la secretaria de Organización del PSM, Maru Menéndez, que en enero afirmó que la participación ciudadana no tendría fundamento dado el liderazgo "consolidado" y "muy compartido" de Gómez. Al día siguiente, el líder del PSM se desmarcó de su número dos, achacando sus palabras a "una opinión personal".

La desautorización se produjo a dos días del Comité Federal del PSOE, en el que se trataría el calendario de las primarias nacionales y regionales. "Soy partidario de elecciones primarias abiertas y lo que voy a proponer en el Comité Federal es que sea para todos los territorios igual", se posicionó. El secretario general del PSM incluso dejó su postura por escrito en su cuenta oficial de Facebook. "Quiero primarias dentro del partido. Además quiero unas primarias lo más participativas posibles. Es decir, abiertas. Abiertas a todos los ciudadanos sean o no afiliados al PSOE pero que se sienten socialistas. La máxima democracia es en definitiva lo que defiendo", esgrimió en un mensaje que ayer permanecía en la red social.

La pax con Ferraz, fruto del pragmatismo y de la debilidad del partido, que apela a la unidad para corregir las fricciones del pasado, han afianzado a Gómez. De entrada, porque sus detractores internos, buena parte fieles a Sánchez antes de que Gómez se reinventase, han sido desactivados en aras de la concordia. Al menos, hasta después de las elecciones autonómicas y locales del próximo mayo, a las que Gómez concurrirá como el candidato. El exdiputado regional César Giner, el único que ha mostrado su interés en presentarse como alternativa, afronta la dificultad mayúscula de conseguir el 10% de avales requeridos (unas 1.500 firmas). “Los avales obligan a la gente a posicionarse, se tienen que mojar y el mensaje del partido es que se entierre el hacha de guerra y se fume la pipa de la paz por un bien común”, señalan dentro del PSM. Responsables del partido, tanto a favor como en contra de Gómez, añaden que es “más difícil” que Giner logre los avales suficientes a que, de pasar el corte, obtenga “como poquísimo” un respaldo del 40% en la elección del candidato a presidir la Comunidad.

Aun así, Gómez ha blindado más si cabe sus posibilidades optando, en contra de lo que siempre defendió, por unas primarias solo para los militantes el 19 de octubre. Al revés que Madrid, los ciudadanos de Castilla-La Mancha podrán participar en la elección del candidato autonómico del PSOE. Extremadura también celebrará primarias abiertas. Y Canarias. Lo mismo harán Navarra y La Rioja, como ya hicieron en primavera en la Comunidad Valenciana y las islas Baleares.Las excepciones fueron Murcia, Cantabria y Aragón (en esta solo hubo un candidato).

También lo será Madrid. La federación que lidera Tomás Gómez desde 2007 -es el único barón socialista de la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero que se mantiene- será la única que designe a su cabeza de cartel en unas primarias cerradas de los seis procesos de elección internos abiertos. Las primarias "de verdad", como las llegó a definir Amparo Valcarce, presidenta del grupo parlamentario socialista en la Asamblea de Madrid, solo serán para militantes: el Partido Socialista cuenta con menos de 15.000 en la región, frente a los 18.000 en 2010 y 30.000 en la etapa de Rafael Simancas como secretario general. Pese ir en contra de lo que siempre ha defendido Gómez, partidario de unas primarias a la francesa hasta que le ha llegado la hora de enfrentarse al formato del que hizo bandera. Obviando la realidad, al menos la parte más incómoda, el secretario general del PSM ha instado al resto de partidos a elegir a sus candidatos en unas primarias.

"Desde aquí reto a que los candidatos de los demás partidos sean elegidos por procedimientos de primarias, por el procedimiento de un militante, un voto", ha lanzado Gómez en su intervención en el Comité Regional, en el que se ha refrendado el calendario de primarias aprobado el sábado en el Comité Federal. El mensaje fue recibido con sorna en Izquierda Unida y UPyD, que elegirán a su jefe de filas en primarias. Al que sí afecta es al PP, donde Mariano Rajoy y las encuestas tendrán la última palabra.

Gómez justificó el sábado su renuncia a las primarias en abierto alegando que "hay que tener confianza en los decidan los militantes del PSOE". Y, aunque las primarias de Madrid no serán abiertas, se puso de ejemplo y afirmó que "siempre han estado a la vanguardia". Fue la primera vez que Gómez aceptaba dar una explicación tras más de una semana en silencio. La Ejecutiva autonómica decidió el formato el miércoles de la semana pasada, la víspera del debate del estado de la región. Entonces, cuando Gómez fue requerido para que argumentara sus razones, no lo hizo porque "no tocaba". En cambio, en su discurso de hoy ha sostenido que el PSOE es el partido "más democrático de toda España". Gómez no fue el único que reescribió su argumentario: la corriente de Izquierda Socialista tampoco ha mostrado oposición a las primarias cerradas en la región, yendo a contracorriente de lo que José Antonio Pérez Tapias defiende.

De haber abierto las primarias a la ciudadanía, Gómez se arriesgaba a perder el control del PSM, con su reducido electorado de apenas 15.000 militantes. Desde su ascenso a los mandos del PSM, Gómez ha afrontado cinco exámenes internos, todos con éxito, aunque cada vez por un margen menor.