Exposición sobre el frente Zirardamendi-Elgoibar en la Guerra Civil

La Fundación Sabino Arana y el Ayuntamiento de Elgoibar promueven la exposición “Goazen gudari danok…Askatasun bidean Zirardamendi-Aiastia (San Migel) Elgoibar, 1936 En defensa de la libertad”, que se mantendrá abierta hasta el 21 de septiembre. La muestra tiene como objetivo recordar los hechos que se desarrollaron a lo largo del frente Zirardamendi-Elgoibar en la guerra del 36. “Lo que en un principio pudiera parecer una batalla más de las muchas que se sucedieron a lo largo de la contienda resultó de un significado especial para Euskadi. Marcó un antes y un después en el transcurso del conflicto y, en gran medida, también en la historia de nuestro País”, ha afirmado el historiador Iñaki Goiogana, comisario de la exposición.

La exposición podrá contemplarse en Elgoibar del 5 al 21 de septiembre, de lunes a viernes, de 18:00 a 21:00 h; y sábados y domingos, de 12:00 a 14:00 y de 18:00 a 21:00 horas. Posteriormente, iniciará una itinerancia por diferentes pueblos como Erandio, Leioa, Mungia, Santurtzi, etc. para, finalmente, ser clausurada en Bilbao.

Según sus promotores, se pretende mostrar lo que ocurrió en este frente de guerra en la quincena de días que transcurren entre septiembre y octubre de 1936 y poner en valor lo que consiguieron aquellos gudaris que lucharon, y algunos de los cuales cayeron heroicamente.

“Si miramos lo que ocurrió aquellos días en el frente pudiera parecer que no fue una gran victoria lo que allí se logró. Al fin y cabo, las tropas leales perdieron las cimas que dominaban y cuando a primeros de octubre cesaron las hostilidades habían retrocedido unos centenares de metros de sus posiciones iniciales. Pero, siendo esto cierto, sí se puede decir que lograron una victoria sobre los franquistas. El 7 de octubre, cuando se estaban pegando los últimos tiros entre, en un extremo Asterrika (Berriatua), entre Ondarroa y Lekeitio y, el otro extremo, Elgeta, José Antonio Agirre, juró su cargo de lehendakari en Gernika. Ese día se puso en marcha una máquina administrativa y de hacer país”, ha destacado Goiogana. El Gobierno vasco puso en pie un ejército, una red de asistencia que atendió a miles y miles de refugiados (especialmente niños), una universidad, un diario en euskera, una red educativa etc. Todo ello entre octubre de 1936 y junio de 1937.

Permencerá abierta hasta el 21 de septiembre y luego recorrerá otras localidades

Por su parte, Alfredo Etxeberria, alcalde de Elgoibar ha querido “recordar y honrar la memoria de todos aquellos que defendieron sus ideales y a las familias de aquellos que no volvieron, y sobre todo, a aquellas que todavía hoy desconocen desenlace alguno”.

“Aquellos jóvenes que perdieron su vida en Zirardamendi no pretendían imponer nada. Sólo pretendían defender lo que consideraban derechos legítimos de su país, sus propios derechos civiles y políticos, individuales y colectivos. Sin ser conscientes de ello ni pretenderlo, inscribieron sus nombres con letras mayúsculas en nuestra historia”, ha subrayado.

El presidente de Sabino Arana Fundazioa, Juan María Atutxa, ha afirmado que “estamos aquí para recordar y para hacer memoria. Recordar quiere decir “volver de nuevo al corazón” y eso es lo que pretendemos hacer. Llevar la gesta y la entrega de aquella generación de vascos que se vieron obligados a defender su tierra con las armas de la memoria al corazón y del corazón, tal y como se dice en euskera, hausnartuz, traerlo a la boca, a la lengua, para una vez de reflexionar, contarlo. Memoria, corazón, reflexión y lengua, todo ello para homenajear a aquellos 14 caídos en Zirardamendi (Jose Txintxurreta, Paulino Beraza, Juan Zabala, Blas Larrazeleta, Ambrosio Etxebarria, Felipe Elorriaga, Sabin Atutxa, Emeterio Llavori, Eusebio Gaubeka, Juan Agirre, Imanol Etxebarria, Marcelino Gandarias, Miguel Palacio, Felix Arbulu); todos ellos del batallón Arana Goiri, son una muestra de todos los que cayeron y sufrieron la guerra y el largo invierno de la dictadura”.

Finalmente, el portavoz de EAJ-PNV en el Congreso de los diputados, Aitor Esteban, familiar de uno de los gudaris muertos en Zirardamendi, Sabin Atutxa, y como estudioso de la batalla de San Migel, ha explicado los que sucedió allí en 1936 y ha recordado el caso de las fosas comunes exhumadas en la zona y las identificaciones a través de pruebas de ADN del getxotarra Sabin Atutxa Olabarri y del leioarra Eusebio Gaubeka.

La muestra se complementa con la difusión de un documental, realizado por la productora Baleuko, en el que se dramatizan los hechos narrados.