Nueve años para estrenar un auditorio sin aparcamiento en Ferrol
Inaugurada una obra que empezó con Feijóo de conselleiro y que ha costado el doble de lo previsto
En Galicia todavía mandaba Manuel Fraga cuando Alberto Núñez Feijóo, entonces vicepresidente primero y conselleiro de Política Territorial, colocó la primera piedra de la obra del Auditorio de Caranza. Fue el 11 de enero del 2005. Nueve años y tres legislaturas después, Ferrol se vistió hoy de tiros largos para estrenar su nuevo contenedor cultural: un cubo aparentemente hermético pero muy luminoso de 7.000 metros cuadrados con vistas a la ría, 900 butacas y acabados en madera.
Su construcción ha sido otro pequeño 'Escorial' para la ciudad, como ya lo fuera en su día la controvertida reforma de la plaza de España que se estiró a lo largo de toda una década. También como ésta, la obra del auditorio se ha visto enredada en varias polémicas desde su inicio hasta hoy.
La Xunta adjudicó la construcción del auditorio a Copasa con un primer presupuesto de 8,2 millones y tenía que estar listo en 2007. Lo cierto es que tardaron ocho años más y costó el doble de lo previsto: 16 millones de euros. Se erigió en una parcela del barrio de Caranza entre el conservatorio de música y la escuela naval de la Armada y carece de un aparcamiento adecuado para su aforo, con apenas 75 plazas. Su acústica, en cambio, es “una de las ingenierías más prestigiosas de España”, destacó hoy el Gobierno gallego.
Dos conselleiros, el de Vicepresidencia, Alfonso Rueda, y el de Medio Ambiente, Agustín Hernández, fueron los encargados de descubrir la placa inaugural del auditorio ferrolano, adornada con la inscripción “Dos galegos e galegas de hoxe para a Galicia de mañá” en ausencia de Feijóo, en viaje oficial a México.
Al reciente contrato con Pemex, que este año adjudicó a los astilleros públicos de Ferrol y Fene la construcción de uno de los dos floteles que Feijóo había comprometido en septiembre del 2012, se refirió hoy Rueda. Expresó su confianza en que ese contrato sea el primero de “muchas buenas noticias” para el naval de la ría, con 2.300 operarios en subactividad desde diciembre y sin fecha de inicio para el buque-hotel.
Mientras, en el exterior del auditorio, un grupo de medio centenar de vecinos se concentró en la plaza pública que está justo enfrente para impedir el acceso de los coches después de que el Gobierno local se plantease utilizarla como aparcamiento auxiliar. Finalmente, los vehículos se desviaron al estacionamiento militar de la Marina, a escasos metros, ya que el nuevo auditorio sólo cuenta con unas 75 plazas.
Su estreno fue un acto formal y muy extenso que se ha hecho coincidir con la festividad local de 'Las Pepitas', llamada así por su proximidad al día de San José (19 de marzo) y declarada recientemente Fiesta de Interés Turístico de Galicia. Consiste, básicamente, en que una rondalla -un conjunto musical de cuerda- cantan a la belleza de la mujer ferrolana durante todo el día de balcón en balcón hasta desembocar en la plaza de Amboage donde se celebra el festival. Precisamente, las rondallas fueron las encargadas de estrenar hoy el escenario del nuevo auditorio para interpretar una de sus melodías más popula
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.